Dos semanas le ha durado a Adrián Fernández su alegría por el tercer puesto alcanzado en el último Gran Premio de Malasia. El piloto madrileño, que celebró por todo lo alto en el circuito asiático el que era su cuarto podio de la temporada, ha visto cómo ese tercer puesto se esfuma por un golpe de reglamento. Un revés inesperado justo antes de afrontar el Gran Premio de Portugal.
La Federación Internacional de Motociclismo ha sido contundente. La descalificación de Fernández, que llega con la temporada casi echada, se debe a una infracción técnica. Concretamente, y según la notificación oficial, se detectó el "uso de una configuración de mapa no homologada" en la centralita de su Honda.
El caos en el box del Leopard ha tenido, al menos, una consecuencia positiva para el motociclismo español. El tercer puesto viaja solo unos metros dentro del mismo box y pasa a manos de David Almansa, su compañero de equipo.
Para Almansa, esta noticia es oro puro. El joven piloto español ve cómo, por carambola, consigue el que es su primer podio en el Campeonato del Mundo de Moto3. Un hito que, aunque conseguido en los despachos, sabe a gloria.
¿Cómo es posible este error en un equipo de la talla del Leopard Racing? Fuentes del equipo señalan que todo fue un desastroso error humano, y no una búsqueda deliberada de ventaja. El lío se originó en unos test privados donde probaron una nueva configuración electrónica.
Tras esas pruebas, la ECU fue reseteada como marca el protocolo. El fallo fatal llegó después: el equipo técnico, en un despiste, olvidó realizar la carga del mapa motor homologado antes de que la moto saliera a la parrilla de salida en Sepang.
Lo más rocambolesco del asunto es que fue el propio equipo el que se dio cuenta de la incongruencia tras la carrera. En un acto de transparencia, los técnicos informaron de inmediato a la Dirección de Carrera del fallo en el procedimiento.
Sin embargo, la honestidad no ha sido suficiente para evitar el castigo. El reglamento técnico es inflexible en estos casos: si el mapa no es el homologado, la sanción es la descalificación automática, sin importar la intencionalidad o la ganancia (o no) de rendimiento.
Así, la foto del podio de Malasia cambia radicalmente. La victoria se mantiene para Taiyo Furusato, seguido de Ángel Piqueras, y con David Almansa ahora inscrito oficialmente como tercer clasificado.
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El caso, no obstante, podría tener un último capítulo. Al Leopard Racing le queda el derecho de apelación. Para ello, deberá presentar el recurso y abonar un depósito de seguridad estipulado en 1.320 euros si quieren intentar recuperar el trofeo perdido de Adrián Fernández.
