
MV Agusta no está dispuesta a que su modelo naked más icónico pierda fuelle. La firma de Varese ha presentado la renovación de la Brutale 800, su naked deportiva tricilíndrica, con una actualización para 2026 que refina la mecánica y dispara la carga tecnológica. El objetivo es claro: mantenerla como la puerta de entrada al exclusivo universo de la marca italiana, combinando diseño y prestaciones.
Desde la fábrica, la promesa que acompaña a este lanzamiento es rotunda. Definen la nueva versión como "brutalmente divertida", un eslogan que pone el foco directamente en la experiencia de pilotaje. Esta Brutale busca ser ágil, rápida y emocional, sin perder el cuidado por el detalle que caracteriza al fabricante.
El epicentro de la renovación es el motor. El conocido tricilíndrico de 798 cc se adapta a la normativa Euro5+. Lejos de ser un mero trámite de emisiones, los ingenieros han optimizado los mapas de motor para conseguir, de hecho, un aumento en la potencia máxima. La cifra oficial asciende ahora a 113 caballos a 11.000 rpm, manteniendo un generoso par de 85 Nm a 7.500 rpm.
Este propulsor conserva una de sus soluciones técnicas más distintivas y derivadas de la competición: el cigüeñal contrarrotante. Esta pieza, heredada de MotoGP, reduce las inercias y es clave para la agilidad y rapidez en los cambios de dirección que definen el carácter de la Brutale. La transmisión sigue confiando en una caja de cambios de 6 velocidades, pero asistida por el sistema electrónico EAS (Electronic Assisted Shift) up and down que permite cambios de marcha sin necesidad de accionar la maneta de embrague.
A nivel de chasis, la Brutale 800 mantiene la icónica estructura multitubular de acero de alto rendimiento, una garantía de rigidez. Sin embargo, la electrónica que lo gestiona es completamente nueva. El modelo 2026 incorpora una plataforma inercial IMU de 6 ejes, un cerebro que monitoriza en tiempo real la inclinación y los movimientos de la moto.


Esta IMU permite una gestión avanzada del control de tracción, del sistema ABS con asistencia en curva (Cornering ABS) y de la mitigación del levantamiento de la rueda trasera (RLM), elevando el listón de seguridad activa del modelo.
El piloto gestiona toda esta tecnología a través de un nuevo cockpit. La instrumentación se centraliza en una pantalla TFT de 5,5 pulgadas que ofrece conectividad Wi-Fi y Bluetooth, control de crucero y compatibilidad total con la aplicación MV Ride. Se incluyen cuatro modos de conducción (Rain, Sport, Race y Custom) para personalizar la respuesta del acelerador y las ayudas.
Una de las grandes novedades de equipamiento es el "Advanced Connectivity Device" que viene de serie. Este sistema añade un plus de tranquilidad al incluir un sistema antirrobo con geolocalización integrada y una función de envío de SMS de emergencia en caso de accidente.


En la parte ciclo, la frenada recibe una actualización significativa con la adopción de nuevas pinzas delanteras Brembo M4.32, que muerden discos flotantes de 320 mm. En el tren trasero se mantiene una pinza Brembo con disco de 220 mm. Las suspensiones, por su parte, son totalmente ajustables: delante, una horquilla Marzocchi de 43 mm, y detrás, un monoamortiguador Sachs.
Visualmente, la moto sigue siendo inconfundiblemente una Brutale. Conserva sus señas de identidad, como el faro en forma de lágrima (ahora LED con luz diurna y función cornering), el espectacular basculante monobrazo y el característico escape de triple salida. Para 2026, estrena un nuevo esquema de color exclusivo denominado Rosso Ago Opaco (mate).
Fabricada en Varese, MV Agusta lanza este nuevo modelo con una garantía de fábrica de 5 años. El precio anunciado para el mercado italiano se sitúa en los 12.600 euros, y todavía no sabemos su PVP exacto en España.
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