La cuenta atrás ha comenzado para Jorge Martín. Tras la grave fractura de clavícula sufrida en Motegi, el campeón del mundo en 2024 ha diseñado un plan de ataque para regresar al paddock lo antes posible. Su hoja de ruta implica sacrificar las próximas citas en Australia y, con toda seguridad, Malasia, para ponerse en manos de los mejores especialistas en el exclusivo Red Bull Athlete Performance Center de Austria.
El Mundial se le frenó en seco a Martín en la carrera al sprint de Japón. Un violento accidente nada más arrancar lo envió directo al hospital y puso en jaque su final de temporada. El diagnóstico fue contundente: una fractura compleja con luxación en la clavícula derecha que obligó a una intervención quirúrgica de urgencia.
No era una lesión cualquiera. El madrileño fue operado en Barcelona por el equipo del Dr. Xavier Mir en una intervención que el propio médico del Mundial, el doctor Ángel Charte, calificó como "complicada". La razón es que "la fractura presentaba tres fragmentos", que afortunadamente "quedaron perfectamente realineados con tornillos de fijación y una placa de contención".
Para volver, primero hay que renunciar. El precio a pagar por una recuperación total es la ausencia confirmada en el Gran Premio de Australia (17-19 de octubre) y, salvo milagro, también en el de Malasia, justo una semana después. Dos carreras cruciales en las que el box de Aprilia notará el vacío de su piloto estrella.
Por eso, Martín ha decidido poner toda la carne en el asador y no dejar nada al azar. En lugar de continuar el periplo asiático, volará a Salzburgo para internarse en la 'fábrica' de campeones de Red Bull. Se trata del mismo centro de alto rendimiento donde Marc Márquez forjó parte de su regreso tras su lesión en el brazo, un lugar dotado con la más alta tecnología para la recuperación de deportistas de élite.
Pero lejos de guardar reposo absoluto, Martín ya sorprendió a sus seguidores en redes sociales subiéndose a la bicicleta estática y realizando ejercicios de cardio pocos días después de salir del hospital. Su viaje a Austria no es el inicio de la recuperación, sino otra fase más, pero con mayor intensidad.
Una mentalidad que el propio piloto verbalizó en un mensaje lanzado en redes sociales:"Si hay algo que he aprendido, es que los momentos difíciles son los que verdaderamente nos transforman. Si los afrontas con resiliencia, te harán más fuerte, ¡de eso va la vida!".
Y es que en el box de Aprilia, su ausencia pesa como el plomo. La marca de Noale se encuentra diezmada por las bajas, ya que a la de Jorge se suma la de Ai Ogura. Los resultados del equipo, ahora en manos de Marco Bezzecchi y Raúl Fernández, fueron un reflejo de esta inestabilidad en Indonesia, alternando la gloria de la victoria de Bezzecchi en el sprint con el revés de su caída en la carrera del domingo.
Leer también: "La temporada de David Muñoz ha terminado", sufre fractura de fémur con 3,5 cm de desplazamiento
El plan de Martín está claro: trabajar sin descanso en Austria para reaparecer en la penúltima prueba del año en Portugal, del 7 al 9 de noviembre, y poder así disputar también la gran final de Valencia una semana después.