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La temporada 2025 está siendo una auténtica prueba de fuego para la paciencia y la fortaleza mental de Pecco Bagnaia. A pesar de haber recuperado sensaciones y competitividad en las últimas carreras, el tricampeón del mundo no está satisfecho. Su mentalidad de ganador le impide celebrar podios o cuartos puestos cuando siente que tiene ritmo para la victoria.
Ahora, en la antesala del Gran Premio de Alemania, el italiano ha lanzado un dardo psicológico a su compañero de equipo y líder del mundial, Marc Márquez, asegurando que toda la presión recaerá sobre los hombros del español en uno de sus circuitos fetiche.
El fin de semana de Assen fue un reflejo perfecto del estado actual de Bagnaia: una mezcla de frustración y optimismo. A pesar de ser el piloto más rápido en pista durante la carrera del domingo, no pudo pasar de la tercera posición, un resultado que no le dejó buen sabor de boca. "En Assen era el más rápido y cuando lo eres y no ganas, no puedes estar feliz", sentenció con rotundidad.
"No puedo estar completamente satisfecho, aunque he sido competitivo desde el principio", prosigue el de Turín. "Tengo que partir de ese punto y tratar de obtener mejores resultados. Subir al podio siempre es positivo, pero no desde mi punto de vista cuando haces un fin de semana como el de Assen".
Con esa mentalidad llega a Sachsenring, un circuito donde el año pasado se alzó con la victoria, pero que no considera ideal para su estilo. "No siento que este trazado se adapte perfectamente a mi estilo de pilotaje, pero la temporada pasada fui competitivo y me divertí pilotando aquí", admitió. "Me gustan las curvas largas, es una buena pista, pero también sé que mi compañero de equipo es muy fuerte aquí. Intentaré divertirme".
Es precisamente la condición de 'rey de Sachsenring' de Marc Márquez la que, según Pecco, juega a su favor. Lejos de sentirse intimidado, el italiano cree que toda la presión recae sobre el #93. "Esta vez será absolutamente Marc el que tendrá la presión, porque en esta pista se espera que desintegre a todos", comentó entre risas, en una clara maniobra para traspasar el favoritismo a su compañero. Su estrategia, por tanto, será intentar mantenerse cerca y aprovechar cualquier mínima oportunidad.
Bagnaia es consciente de que el Márquez de 2025 ha aprendido de sus errores. Recuerda el Gran Premio de Austin, donde también se esperaba un dominio del de Cervera y acabó por los suelos. "En Aragón ganó sin exagerar y controlando, en mi opinión, Austin le sirvió de lección. Creo que esta es una pista donde es incluso más rápido que en Austin y Aragón, habrá que intentar estarle cerca y meterle un poco de presión. Yo, sin embargo, tendré que dar un paso adelante importante".
A pesar de las dificultades y de dos fines de semana "echados a perder" en Le Mans y Silverstone, el piloto de Turín asegura que su estado anímico es bueno. "Llego aquí bien, como siempre. Pongo todas mis energías en encontrar una solución y sé con certeza que estamos en el camino correcto", afirmó, demostrando una confianza inquebrantable en su equipo y en su capacidad para revertir la situación.
En un sorprendente ejercicio de autocrítica, Bagnaia también ha revelado que recientemente pidió disculpas a su equipo por su actitud en algunas sesiones de entrenamiento. "Hasta Assen hubo situaciones en las que no había trabajado demasiado en la dirección del equipo, hacía pocas vueltas, probaba poco y no era rentable", confesó. "Es mejor rodar aunque no te encuentres bien sobre la moto, para recoger datos y ayudar al equipo. Si me piden que haga 5 vueltas y yo hago dos, no sirve. Intentamos trabajar en una dirección conveniente para todos".
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Con la vista puesta en el fin de semana y en la lucha por el campeonato, Bagnaia no quiere pensar en la lesión de Álex Márquez como una oportunidad para acercarse al segundo puesto. Su objetivo es otro. "Quiero sentirme bien, hacer un buen fin de semana. Álex está lesionado, pero se ha operado pronto. No estará al 100%, pero aquí son todas curvas a izquierdas y no creo que tenga grandes problemas".
