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A simple vista parece que Freddie Spencer ha vuelto con su NS500 directo desde 1983. Pero que no te engañe esa carrocería ochentera, los carenados cuadrados y ese escape bajo el colín: lo que hay debajo de esta joya retro es pura tecnología moderna. Bienvenidos a la “Freddie Blade”, una Honda CBR 1000 RR del año 2007 transformada con mimo por el equipo de RindPerformance en una réplica funcional, pero legal para la calle, de la mítica NS500.
Sí, hablamos de una Fireblade con alma de dos tiempos y espíritu ochentero. La idea, según sus creadores, era “recuperar ese espíritu inconfundible de las motos de carreras de los 80: colines envolventes, escape bajo el asiento, frontal ancho... todo el rollo. Pero quería hacerlo sobre una base moderna, legal para la calle”. El resultado es un restomod que mezcla lo mejor de dos épocas muy distintas de Honda.
Para lograrlo, el equipo partió de una Fireblade SC57, modelo conocido por su más que contundente entrega de potencia y por el escape bajo el asiento, ya de serie. El trabajo comenzó por construir un nuevo subchasis, necesario tanto para soportar el colín personalizado como para encajar el sistema de escape artesanal.
Además, el basculante fue sustituido por uno ligeramente más largo y se añadió un ajustador de altura al estilo MotoGP para el tren delantero. Las suspensiones regulables Showa y los frenos radiales Nissin son los mismos que monta la Fireblade original.
No se quedaron ahí. El radiador original fue reemplazado por uno más compacto, se diseñaron paneles laterales a medida, y las llantas PVM montan neumáticos Michelin Power Cup 2, todo controlado por un Power Commander y quickshifter, para afinar aún más la respuesta del tetracilíndrico en línea.
Eso sí, aquí no hay V3 de dos tiempos rugiendo a 11.000 revoluciones como en la NS500 original de Freddie Spencer. A cambio, el motor de 1000 cc y cuatro cilindros de esta CBR alcanza los 170 caballos de potencia—muy por encima de los 130 CV que declaraba aquella campeona del mundo del 83— y todo sin dejar una nube azul a su paso.
La NS500 fue la heredera espiritual de la NR500 de pistones ovales (otra locura técnica de Honda), y aunque solo compitió en 1982 y 1983, dejó huella ganando el Mundial con Spencer. Luego llegaría la más conocida NSR500, que reinó entre 1984 y 2002 con leyendas como Eddie Lawson, Mick Doohan, Valentino Rossi y el propio Freddie.
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Pero esta réplica moderna no busca competir en campeonatos. Su objetivo es diferente: “Me he construido una NS500 para la calle”, remata RindPerformance. Y, visto lo visto, lo han clavado.
