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La nueva vida de Aleix Espargaró tras su retirada a tiempo completo de MotoGP sigue deparando sorpresas mayúsculas. El piloto de Granollers, que a principios de año se unió al equipo ciclista Lidl-Trek en un rol de embajador, está a punto de llevar su pasión por las dos ruedas a un nivel completamente nuevo: el próximo 9 de julio, tomará la salida en la Vuelta a Austria, lo que supondrá su debut oficial en una carrera ciclista profesional.
Este emocionante desafío lo afrontará como parte del Lidl-Trek Future Racing, el equipo de desarrollo de la potente estructura estadounidense. La noticia confirma que la relación de Espargaró con el ciclismo, que siempre fue una pieza fundamental de su preparación física durante su etapa en MotoGP, ha trascendido el simple entrenamiento para convertirse en una faceta competitiva de pleno derecho.
El propio Aleix no oculta su satisfacción por esta nueva etapa. "Estoy muy feliz de cómo ha ido este año, cambiando completamente mi vida y todo lo que hacía antes", ha declarado el catalán.
"Ha sido increíble formar parte de un equipo tan grande como Lidl-Trek. He crecido mucho como ciclista y he aprendido muchas cosas en estos seis meses. Me siento bien, y realmente no puedo esperar para competir y probar mis piernas contra algunos de los mejores ciclistas del mundo", apunta el probador de Honda en MotoGP.
Pero lo que hace aún más extraordinario este debut es el contexto en el que se producirá. Su primera carrera en el pelotón profesional llegará apenas una semana después de que se suba de nuevo a una MotoGP. Está previsto que Aleix compita como 'wildcard' sustituyendo al todavía lesionado Luca Marini en el equipo Honda Castrol Team durante el Gran Premio de los Países Bajos, en el mítico circuito de Assen, los días 28 y 29 de junio. Un "doblete" de infarto que pone de manifiesto su increíble polivalencia y su inagotable espíritu competitivo.
A pesar de la emoción, Espargaró afronta su debut ciclista con una notable dosis de humildad y realismo. "Tendré un equipo fuerte a mi alrededor para enseñarme los trucos del oficio", reconoce. "Será también genial porque la semana antes de competir en Austria, competiré como 'wildcard' en MotoGP en Holanda. Será un bonito desafío, pero no tengo expectativas para mi debut en el ciclismo. Intentaré aprender lo máximo posible, ayudar a mis compañeros y, lo más importante, ¡disfrutar del sufrimiento!".
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Esta oportunidad de competir al más alto nivel sobre la bicicleta es la evolución natural de un rol que comenzó como embajador de la marca. Su integración en la estructura del Lidl-Trek ha sido total desde el principio, compartiendo entrenamientos y experiencias con los profesionales del equipo, lo que sin duda ha acelerado su aprendizaje y adaptación a las dinámicas del ciclismo de élite.