 Por John Fernández@johnfervar |
En España, más del 23% de las motos con menos de 25 años circulan sin la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) al día. Un dato que sale directamente de la Dirección General de Tráfico (DGT) y respaldado por AECA-ITV que pone en evidencia una realidad peligrosa: cada vez hay más motos viejas, en peor estado y sin los controles mínimos exigidos para circular.
"La ITV es esencial para reducir la siniestralidad vial en motocicletas. Sólo a través de estas comprobaciones periódicas se puede garantizar el correcto funcionamiento de los vehículos", advierte Guillermo Magaz, director gerente de AECA-ITV. Y razones no le faltan. En 2024 murieron 289 motoristas en las carreteras españolas, el peor dato en una década y por encima incluso de los registros de 2015. El 26% de estas muertes se produjo en autopistas y autovías, un 13% más que en 2023, mientras que el resto ocurrió en vías interurbanas, que aunque siguen concentrando la mayoría de accidentes, han bajado ligeramente.
La relación entre siniestralidad y estado del vehículo es directa. La media de antigüedad del parque de motos en España se sitúa en 16,9 años, más alta incluso que la de los coches. Y aunque muchas de esas motos deberían pasar la ITV, no lo hacen. Algunos lo ven como una forma de ahorrar: si se enfrentan a un resultado desfavorable, optan por no presentarse. Pero olvidan que circular sin ITV cuesta 200 euros (100 con pronto pago), lo mismo que hacerlo con una desfavorable. Y si es negativa, la sanción sube a 500 euros, además de la inmovilización del vehículo.
Por comunidades autónomas, Baleares lidera el ranking del incumplimiento con un 28,6% de motos sin ITV o con ella caducada. Le siguen Melilla (27,7%) y Extremadura (27%). En el otro extremo se encuentran Madrid y Aragón, con un 20,8% de incumplimiento, aunque siguen siendo cifras preocupantes.
El dato del 23,3% solo recoge motos con menos de 25 años. Si se incluyeran las más antiguas, el porcentaje podría dispararse. Y no hablamos de ciclomotores de campo abandonados, sino de vehículos en circulación. "Es un auténtico riesgo para la seguridad vial", resumen desde AECA-ITV.
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A esto se suma la nueva reforma de la DGT que afectará a todas las motos a partir de 2025: mayor control tecnológico en las inspecciones, sistemas más precisos y posiblemente nuevas exigencias de emisiones. En un contexto donde cada vez más motos se escapan del radar, la ITV se convierte en la única barrera entre un vehículo inseguro y la carretera. Motos sin revisar, con frenos viejos, neumáticos cristalizados o luces defectuosas, siguen rodando sin control. Un 23,3% de irresponsabilidad... que puede costar vidas.
