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El paso de Marc Márquez a Ducati traerá ciertas consecuencias, como es obvio. Aunque se encuentre trabajando para la misma marca, hay ciertas concesiones impracticables, y eso significa que el 93 tendrá un nuevo jefe de equipo la próxima temporada. Eso supondrá que se separará de Frankie Carchedi, el técnico italiano que se ha encargado de ayudar a entender y preparar la moto del piloto de Cervera en el garaje de Gresini.
Carchedi seguirá con su trabajo en el box del Gresini, y su nuevo supervisado será Fermín Aldeguer durante 2025. Mientras, Márquez tendrá a su lado a Marco Rigamonti en el equipo oficial de Ducati, tal y como ha confirmado Crash.net.
Asimismo, lamenta la pérdida de Marc en el box del Gresini, que ahora recuerda, “cuando llegó Marc, hubo felicidad, pero también tristeza con la partida de Fabio Di Giannantonio. Haces todo el trabajo, al final del año, posiblemente fuimos los más rápidos en la pista [con Diggia] y luego estás empezando de nuevo. Y será exactamente lo mismo [con Fermín en 2025]”, valora.
Ahora Carchedi tendrá algo más de tiempo para trabajar con Aldeguer, concretamente dos años: “Con él tenemos dos años, así que eso es algo muy positivo para mí porque puedes progresar, es como las relaciones, todo lleva tiempo”.
La relación entre técnico-piloto es, a veces, mágica. Explicar sensaciones, miradas, comunicación... El técnico italiano hizo bien en compararlo con una relación de pareja. Y hasta se acuerda de la compenetración de Marc Márquez con Santi Hernández en el box del Repsol Honda Team: “Estoy seguro de que al final ni siquiera tenía que hablar con él. Sabía exactamente con solo mirarlo lo que quería hacer con la moto. Así es como funciona”.
Frankie llegó a desenvolverse bien con Marc, y recuerda que “podría decir lo mismo con Marc al final, sin siquiera quitarse el casco, sólo había que mirarlo y saber exactamente si iba bien o no. Es sólo una relación. Y cuanto más tiempo pase, mejor se entenderán”, ejemplifica.
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La buena relación de Márquez con Carchedi solo se puede comprobar de una manera: viendo los resultados del 93 sobre la Ducati del Gresini. Lo que él mismo ha definido como su “renacer”. “El único momento en el que realmente dije ‘wow’ fue en Valencia, durante el test de noviembre. Había literalmente unas 200 personas fuera del box”, recordó. “Pero una vez que empiezas a trabajar, todo eso desaparece. Da igual quién sea el piloto, siempre buscas el mismo objetivo: acabar lo más arriba posible”, cuenta Carchedi sobre lo que sucedió hace ahora ya más de un año sobre su expiloto.