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Uno de los momentos simbólicos de la serie documental de Amazon ‘Marc Márquez. All In’ fue cuando el 93 anunció su retirada temporal para someterse a su cuarta operación en el brazo. Es uno de los puntos en los que más se centra el documental, y en concreto el momento en el que aparece Aleix Espargaró en escena, llamando a su puerta y deseándole al de Honda buena suerte poco después de anunciar en rueda de prensa que se marchaba a EEUU.
Chocó, porque el contexto nos decía otra cosa totalmente distinta. Antes de eso, hay que remontarse unas cuantas carreras atrás. Un momento simbólico concretamente: Aleix Espargaró le sacaba la mano a Marc Márquez en tono de propuesta unos cuantos GPs antes, en Jerez. El de Granollers se enfadaba entonces con el de Cervera por “chupar rueda”.
Espargaró se quejaba, Márquez respondía: "No le quiero dar más bombo. Es lo natural del motociclismo. Se queja por todo", decía Marc en respuesta. “No sé de qué se quejaba. Iba lento, no quería ni buscar una rueda porque no tenía ni la velocidad, ni la moto que tocaba y sabía que no podía mejorar mucho el tiempo”. Aquello no sentó demasiado bien a ninguno de los dos, y la tensión se cortaba con un cuchillo.
A juzgar por el enfado de uno y las palabras de otro, la relación no pasaba por el mejor momento después del marcaje del #93 al #41. Después de aquello vino Francia, y después, Italia. En Mugello, el de Cervera anunciaba su retirada temporal para pasar por quirófano y arreglar su brazo derecho. La tensión seguía en el ambiente después del incidente en Jerez, pero el de Aprilia quiso zanjar el tema dándole la mano a Márquez en la vuelta de despedida, como gesto de aprecio y buena suerte.
A pesar de ello, Aleix no le dio mucha importancia y tal y como revela Marc en su docu-serie, junto con Quartararo, fueron los dos únicos pilotos que tocaron su puerta para visitarle ese día. El #93 incluso se emociona al ver las imágenes. “Al final son cosas que salen de cada uno. Cada uno tiene un carácter distinto”, explicaba Espargaró a DAZN.
“El Gran Premio antes me habían puesto doblado en redes porque en el crono y libre Marc se pegó mucho a mí y yo empecé a hacer gestos con la mano para que no se pegara y me pusieron doblado”, rememoraba el #41 sobre la situación vivida con Marc el año pasado.
El de Aprilia se defiende: “Tampoco era un héroe cuando fui a desearle suerte a un compañero que se va a operar de una lesión gravísima, que no sabe si va a poder seguir corriendo. Caliente en la pista todos se pueden calentar, pero al final todos somos compañeros y me pareció un detalle estando al lado un motorhome al lado del otro”.
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Narra Espargaró que llamó "a la puerta, le desee buena suerte, que vaya todo bien por América y que vuelvas pronto y luego ya si en pista nos vamos a dar hachazos y luchar por victorias y podios y ojalá así sea así". Sentencia que "una cosa no quita la otra", en relación al asunto, que zanjaron de una forma afable.