 Por John Fernández @johnnyfumi |
Con el fin de la temporada de MotoGP y el descanso invernal llega una práctica habitual para los pilotos del mundial, y que tiene que ver directamente con la medicina. Muchos de ellos aprovechan el parón para someterse a alguna intervención quirúrgica que tenían pendiente por algún problema menor durante la temporada y que suele ser fácilmente solucionable.
El motivo principal de que no lo hagan durante la temporada parece obvio: no perder ninguna cita por algo que pueden ir atrasando sin demasiadas consecuencias durante los Grandes Premios. Este invierno hay dos pilotos que tenían cuentas pendientes con los quirófanos: Fabio Quartararo y Álex Rins.
El español ha querido dejar de lado unas molestias que padecía desde hace tiempo: el síndrome compartimental, algo muy común en los pilotos de competición que afecta a los nervios del brazo. Pues bien, el ahora piloto de Honda se ha sometido a una intervención quirúrgica en la Clínica Ruber de Madrid, tal y como ha confirmado él mismo.
Es un problema que acusó especialmente en la parte final de la temporada, donde tras una revisión, los médicos le recomendaron operarse. En Madrid y a cargo del doctor Ignacio Roger de Oña, el catalán compartió a través de las redes sociales la “pequeña reparación de chapa y pintura para llegar a tope al 2023”, posando con el brazo en un cabestrillo y haciendo un gesto positivo.
A riesgo de parecer algo grave, lo cierto es que tan solo unos pocos días antes (el fin de semana pasado), Rins estuvo montando en moto para participar en los 100 Kilómetros de los Campeones que Valentino Rossi organiza cada año en su rancho de Tavullia.
Otro de los hombres que tenía pendiente pisar el quirófano era Fabio Quartararo que, por el momento, evitará hacerlo. La causa se remite al Gran Premio de Malasia, cuando durante los entrenamientos libres del viernes, se fue al suelo y se fracturó el dedo medio. Incluso corrió con un dedo roto aquella carrera.
Después del accidente, anunció que se operaría para solventar el problema tras someterse a una revisión en Francia, donde se determinó que sí, que tenía una lesión, e incluso se sometió a una operación sin mucha complicación para reparar el hueso del dedo. Poco después, Yamaha anunció la necesidad de pasar por quirófano, calificando el proceso de “no urgente”, a tientas de esperar “una vez finalizada la temporada”.
Ahora, según señala el medio Motorsport, Quartararo no se someterá a la cirugía en cuestión. En declaraciones, Yamaha dice que su piloto se ha recuperado y que se trataba de una cirugía por “razones cosméticas” y no tanto "terapéuticas", remarcando que parece estar ya recuperado.
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Cuando hablan de razones cosméticas se refieren a que el dedo padece una torcedura ínfima pero que, al fin y al cabo, está presente, y que no ven necesario que se someta a una intervención solo por ese motivo. Así, Rins es el único piloto que pasará por ‘boxes’ para pulir los problemas médicos, y que parece ya estar recuperado según lo que ha puesto en sus redes sociales.
