 Por John Fernández | Foto: MotoGP.com@johnnyfumi |
Decepcionante. Es el perfecto adjetivo que ha utilizado Fabio Quartararo para hacer autocrítica y un análisis de su sábado de clasificación en el Gran Premio de San Marino y Rimini Riviera. Su octava posición no le ha resultado del todo agradable. Desde luego que su actuación en la Q2 no ha sido precisamente estelar, o al menos no ha sido lo que se esperaba del máximo contendiente a revalidar su título mundial. Hablamos de que ha estado varias milésimas por detrás del tiempo récord de Miller, pero en su defensa, las condiciones no han sido fáciles para ningún piloto.
La climatología no ha respetado a la Q2 de MotoGP, que, sin pasar por agua, dispuso una pista realmente húmeda, lo que empeoró el pilotaje. "Las condiciones eran muy complicadas, especialmente porque no podíamos usar los pianos. Todo está muy apretado y lamentablemente no pudimos hacer una clasificación muy buena", ha comentado a los periodistas en la sala de prensa posterior a la sesión de clasificación.
El francés está claramente decepcionado consigo mismo a pesar de darlo todo: "Todo está muy apretado y lamentablemente no pudimos hacer una clasificación muy buena", ha comentado al respecto. Argumenta que no ha podido aprovecharse de la Yamaha porque "con estas condiciones hay algunas curvas en las que no puedes subir a los pianos, como la curva 6, ya que realmente no pude mantener la velocidad que podemos tener con la Yamaha, y no hay aceleración".
Tal es su decepción que ha hecho un escarnio público a Yamaha. Un tirón de orejas que ya está afectando a su actitud sobre la moto: "Así que sí, estoy decepcionado porque sigue siendo el mismo problema. Estoy empezando a divertirme mucho menos que antes, y necesitamos encontrar una solución bastante rápido. No quiero quejarme, porque creo que todo el mundo sabe dónde está el problema, pero ya sabes, cuando estás luchando por las primeras posiciones y victorias todo el tiempo, te diviertes mucho más que cuando haces una tercera línea".
A pesar de ello, recalca saber que Yamaha "tiene el potencial para hacerlo mejor", a pesar de las condiciones. Se ve "súper lejos de los demás", y no solo eso, sino que es incapaz de buscar huecos para adelantar: "Este es el problema. ¿Dónde puedo adelantar? No sé. Es un circuito en el que necesitas mucha aceleración y frenada", aqueja el actual campeón del mundo.
El piloto oficial de Yamaha no puede aprovechar al máximo cada centímetro del circuito, lo que le hace perder una pequeña diferencia: "Aceleramos, pero en comparación con los demás no tenemos nada. En las dos últimas curvas no tomé el piano exterior y ya estaba perdiendo unos centímetros, pero estos pocos centímetros, sinceramente, hacen una pequeña diferencia", reitera y sentencia Quartararo.
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Su actuación se podrá ver a partir de mañana en la tercera línea de salida de la parrilla, donde Luca Marini saldrá 7º, el propio Quartararo 8º y Espargaró, justo por detrás de él, 9º.
