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Es innegable que Maverick Viñales está ante una buena no, buenísima racha. Atrás quedan los días grises en Yamaha, y los dificultosos inicios en Aprilia. Ahora la RS-GP y Top Gun son uno. Hasta el punto de que Aleix Espargaró le ha cogido la configuración de la moto al de Roses.
Hoy, en San Marino, ha estado en la pomada. Ha luchado por la primera posición, incluso, aunque se le ha escapado con un 5º puesto nada desdeñable. El podio solo se antoja de una manera para Viñales: en lo más alto del cajón.
Su sábado ha estado marcado por un positivismo verdaderamente notorio en su cara. El piloto de Aprilia parece que le ha cogido el gusto a la RS-GP y está dispuesto a dar una alegría a la fábrica de Noale precisamente en el Gran Premio de casa. En declaraciones post sesión clasificatoria recogidas por GPOne, el piloto español revela que está "muy contento con el resultado y que la Aprilia está funcionan muy bien".
Ya venía dando avisos en el FP3 mañanero, aunque no lo dio todo en el FP4 al medio día. "Cuando empujaba, la moto respondía muy bien, y por la tarde también mejoramos en tres o cuatro puntos. En estas condiciones tan difíciles solemos sufrir", dice en referencia al neumático utilizado. Para mañana vaticina un medio delante, aunque "preferimos el duro, que nos ayuda a frenar la moto".
Los sectores 3 y 4 del circuito son sus favoritos. La tabla de progresión no miente. "En el tercer sector soy el segundo más rápido, pero me siento fuerte en todos los lados", explica. Ya sueña con la victoria: "La victoria está muy cerca, ahora toca trabajar duro. Por suerte hay tiempo, todavía tenemos el warm up".
Es consciente de la oportunidad que se le presenta para alcanzar su tan ansiada primera victoria con la fábrica de Noale: "Tenemos una buena oportunidad, hemos recopilado muchos datos, hemos trabajado bien y hemos hecho algunas pruebas en la configuración, mañana tendré que dar lo mejor de mí".
No todo fue sobre ruedas. Al principio de la sesión clasificatoria tuvo que volver a entrar a boxes a cambiar neumáticos por haber elegido slicks en vez de gomas de lluvia: "Me asusté, estaba lloviendo cuando vi que Bezzecchi y Marini me adelantaron. Estaban al borde. En estas condiciones, cuando llueve y no llueve, no se sabe si llevar slick o lluvia, es muy difícil", sentencia, aunque no está "preocupado", ya sabe su táctica: "Cerraré los ojos y me tiraré".
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¿Carrera flag-to-flag mañana? La climatología amenaza "Prefiero una carrera completa, o de una forma, o de otra. Pero si la hay, seguiré a Jack, haga lo que haga, lo haré. Hubiera copiado a Marc antes, pero ahora copio a Miller", comenta en un tono jocoso. Por delante de Viñales saldrán Bezzecchi, Bastianini, Bagnaia y Miller. Toda la armada Ducati contra la RS-GP de los de Noale.