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Alex Rins no tuvo más remedio que ver los toros desde la barrera en Montmeló. La caída que el #42 de Suzuki sufrió el jueves por la tarde mientras entrenaba con su bicicleta dentro del Circuit de Barcelona-Catalunya le impidió tomar parte en su carrera de casa, una caída que le provocó una fractura en su muñeca derecha de la que fue operado con éxito durante la mañana del viernes.
El sábado, el piloto catalán tuvo la oportunidad de comentar desde la cabina de retransmisiones de DAZN el cuarto entrenamiento libre de MotoGP, una sesión en la que Rins valoró la situación de algunos de sus rivales y en la que también habló de las cuatro últimas caídas que ha sufrido en carrera desde que el mundial aterrizó en Europa, dejando claro que estará en la próxima cita del campeonato prevista en Alemania.
El piloto de Suzuki reconoció que "cuesta ver" el origen de algunas de esas caídas, especialmente las que sufrió en Mugello y Portimao cuando intentaba luchar posiciones de privilegio en el podio: "Cuesta verlo. Yo con Manu (Cazeaux, su jefe técnico) cogemos estas últimas cuatro caídas que nos hemos caído, la de Jerez la descartamos porque fue un fallo mío el hecho de irme largo, querer entrar en seguida y perder la rueda delantera; la de Le Mans... ostrás, salir de boxes y con agua caerte, bueno. Pero la de Portugal y la de Mugello son caídas que cuesta ver si es de delante o de atrás con tanto ángulo".
Rins lamentó especialmente el no haber podido competir en Montmeló para probar una solución técnica que quizás podría ayudarle a evitar caídas similares en el futuro: "Es una pena, porque para Catalunya queríamos probar una cosa que llevábamos antes. A mitad del año pasado, después de ganar en Aragón, probamos una configuración diferente que me permitía entrar con más freno en la curva, me sentía bien. Nunca llegamos a probar lo de antes para confirmar que esto que probamos en Alcañiz iba bien, y lo teníamos justo para probar en este circuito. Las caídas que he tenido han sido de estar en máximo ángulo".
Dejando a un lado sus problemas, Rins habló del piloto de mayor edad de la parrilla, Valentino Rossi, que acabó en el suelo el domingo tras un fin de semana en el que parecía estar recuperando algo de velocidad. "Valentino está sufriendo, no le está siendo fácil", dice Rins. "Creo que otro ya habría dejado claro que no seguiría el año que viene. Es un luchador, es increíble, los años que tiene y lo que se debe de entrenar. Yo creo que antes el entreno físico que tenías que hacer en el gimnasio no era el mismo que ahora. Te hablo gimnasio, ir en bici, montar en moto...".
Respecto al líder del campeonato, Fabio Quartararo, el piloto español está convencido de que "ha dado un paso adelante de madurez, de pilotaje, ese Quartararo que el primer año cuando estaba luchando con Marc que hizo segundo en tantas carreras, ha sabido dar ese paso adelante. Se ha centrado, no ir tanto a lo loco, y lo tiene claro".
Alex Rins es muy amigo de Jorge Martín, piloto con el que comparte país de residencia y del que no se esperaba un estreno en MotoGP tan bueno a pesar de su caída en Portimao: "La lesión le paró un poco el progreso, pero el tío en Andorra se ha estado recuperando muy rápido, mucho sacrificio. Martín es un piloto que tiene sangre de luchador. Cuando yo estaba en Qatar, en la segunda carrera que él lideró tantas vueltas, ostrás... que es un rookie, ¿sabes? Sí, la moto corre mucho en la recta, pero hay que estar ahí".
A la pregunta de si la configuración de su Suzuki es muy diferente a la que emplea Joan Mir habitualmente, Rins confesó que el balear suele aprovechar con frecuencia su puesta a punto de cara a los domingos: "Es verdad que muchas veces empezamos los grandes premios con motos muy diferentes a nivel de puesta a punto, pero la mayoría de veces él prueba mi setup y la carrera la hace con esa puesta a punto. Hay carreras que vamos diferentes y carreras que vamos similares".
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Por último, abordando los problemas que este año arrastran los cuatro pilotos Honda, Rins admite no saber muy bien qué le falta a la RC213V para ser una moto competitiva, y destaca que "en recta las Honda corren". "Si te soy sincero, años atrás en carreras como de la Silverstone, que hice toda la carrera detrás de Marc, veías que sí, que el punto flaco es hacer girar la moto, no giraba mucho, pero te hablo de Marc antes de la lesión, él la hacía girar", dice al respecto.
"Es complicado decir qué le falta a la Honda. Desde fuera, cuando vas detrás de ellos, no es que digas 'falta esto o lo otro'. A Pol le está costando, pensaba que le sería un poco más fácil, él es un piloto de frenar fuerte hasta dentro y girar. Al final es lo que hacía con la KTM, iba rápido porque frenaba súper rápido. No tiene que ser una moto fácil", concluía el #42 de Suzuki.