 Redacción @todocircuitoweb |
Las motos deportivas y, en general, cualquier motocicleta con una potencia por encima de los 100 cv se pueden convertir rápidamente en una auténtica herramienta 'quita puntos' si somos demasiado generosos con el gas en carretera, especialmente si circulamos por vías de un único sentido con la velocidad limitada a 90 km/h.
Hoy en día, entre helicópteros, drones de la DGT y los nuevos radares portátiles de la Guardia Civil, es recomendable tomarse con tranquilidad cualquier ruta de fin de semana y dejar nuestras ganas de darle al mango en casa, o mejor, en los circuitos de velocidad, donde puedes desfogarte todo lo que quieras por poco más de 100 euros.
El vídeo que hoy os mostramos es un buen ejemplo de cómo podemos arruinar estrepitosamente un domingo de motos y amigos por querer exprimir la potencia de nuestra máquina donde no debemos. Sus tres protagonistas fueron cazados por un radar montado en un vehículo camuflado de la Guardia Civil en una carretera nacional limitada a 90 km/h.
El motorista que va grabando la acción desde su moto naked clava los frenos cuando llega a la altura del coche radar, a casi 160 km/h. Sus compañeros, sin embargo, no se percatan de su presencia y hacen la recta gas a fondo, un error del que no tardarán en darse cuenta.
Tras ser detenidos por un coche patrulla ubicado un par de kilómetros más allá del radar, el agente les avisa de que la velocidad registrada ha superado los 190 km/h de forma holgada. "Ahora vendrá el del radar y nos dirás quiénes habéis caído a 190 y algo", les dice el Guardia Civil, al que responden con un "¿qué dices?" a modo de sorpresa.
Superar en más de 80 km/h el límite de velocidad de una vía interurbana está considerado como un delito que puede acarrear una pena de prisión de tres a seis meses, una multa de seis a doce meses o bien trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, sin olvidar que estos motoristas también perderán seis puntos de su carnet y tendrán que afrontar una multa de 600 euros.
Además, este tipo de delitos también conllevan la retirada del permiso de conducir por un plazo de uno a cuatro años según estime el juez.
Desconocemos en qué situación administración se encontrarán ahora mismo estos tres motoristas, pero algo nos dice que la próxima vez que se suban a sus máquinas se lo pensarán dos veces a la hora de rozar los 200 km/h en una carrera de un único sentido con salidas y entradas de viviendas a los lados.
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Aquí puedes ver el vídeo:
