 Redacción @todocircuitoweb |
Jorge Lorenzo está aprovechando como pocos su retiro dorado del motociclismo profesional. Pendiente todavía de saber qué hará el próximo año, el piloto balear ha aprovechado la reapertura de las fronteras tras la pandemia de coronavirus para disfrutar estos días del calor y la excelente temperatura de Dubái, donde se ha dejado querer por los lujos de esta ciudad de los Emiratos Árabes Unidos.
Ya sea en Dubái, Lugano, Milán o cualquier otra parte del mundo, las redes sociales del #99 están llenas de fotografías y de vídeos de lo que para muchos sería una vida soñada en la que no faltan destinos idílicos, coches de gama alta y una sonrisa de satisfacción contante por parte de un Lorenzo que, hoy más que nunca, está disfrutando de todo aquello que se ha ganado con creces en la última década y media.
Tal y como ha explicado el balear al portal The-Race.com, el hecho de no estar vinculado con ninguna fábrica o patrocinador de peso le da esa libertad de compartir lo que se le antoje entre los más de seis millones de personas que le siguen en sus redes sociales: "Ahora que no dependo de ser un piloto oficial o de trabajar con patrocinadores, puedo mostrar más o menos lo que yo quiero en mis redes sociales. Puedo mostrar la auténtica vida que vivo", afirma el tricampeón de MotoGP.
Lorenzo cree que la mayoría de sus fans están agradecidos por compartir esos momentos de su vida privada con ellos, y asegura entender a aquellos que le critican por exhibir de este modo sus viajes o las carísimas compras que también muestra en sus perfiles de Instagram y Facebook, la última un exclusivo Lamborghini Aventador SVJ 63 Roadster valorado en medio millón de euros.
"Parece que la gente lo aprecia, aunque hay algunos que están un poco en contra porque mi vida auténtica es viajar y pasarlo bien", afirma al respecto. "Algunas personas tienen envidia, pero creo que se acostumbrarán a ello porque así es como mi vida irá ahora, al menos por el momento. Todo los seres humanos son un poco 'haters', porque la envidia es un sentimiento humano, y necesitas vivir con ello".
Al igual que ahora, Jorge también ha tenido que lidiar todos estos años con un sector de la afición que no parecía entender su forma de ser y de entender la vida, algo que el español atribuye a la gran rivalidad que ha mantenido con Valentino Rossi desde que saltó a MotoGP en el año 2008: "Creo que la razón principal por la que siempre he tenido malos comentarios dirigidos a mí es porque he corrido contra Valentino, sobre todo después de la polémica de Malasia 2015", admite Lorenzo.
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Sin embargo, el piloto balear también ha notado que esos comentarios negativos que recibía se han ido reduciendo de forma drástica durante sus últimos años en activo, y es que tal y como explica el propio Lorenzo, el tiempo lo cura todo: "El tiempo es un gran sanador, los humanos olvidan los sentimientos negativos y positivos muy rápido, y puede que a medida que ha pasado el tiempo los fans han empezado a entenderme un poco mejor, o quizás yo he cambiado como persona. Quizás hubo gente a la que toqué con mi rueda de prensa en Valencia el pasado año, y la respuesta ha sido popular", finaliza el ya exprobador de Yamaha en MotoGP.
