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 Laura Rangel @todocircuitoweb | Google+ |
A sus 59 años, la leyenda de MotoGP Randy Mamola volverá a la competición a lomos de una Indian ultra preparada por Brice Hennebert, del taller Workhorse Speedshop. Lo hará en el campeonato de aceleración Sultans of Sprint, una prueba para motos café racer y de estética vintage en la que no solo se premia a los más rápidos, sino también las mejores personalizaciones.
La IndianxWorkhorse Sprint Racer es una moto única construida sobre la base de una Indian Scout Bobber, y no es casualidad que el piloto estadounidense vaya a competir con el número 19. Lo hará para conmemorar 1919, el año en que se lanzó la Indian Scout original.
Mamola ha declarado a Ultimate Motorcycling: “Siempre he sido un gran fan de Indian y tengo muchas ganas de competir con esta increíble creación. Es genial ser parte de este proyecto, especialmente durante el 100 aniversario de la Scout. Sultans of Sprint es una competición única, va a ser muy divertido vivir el ambiente, conocer a los aficionados y ofrecer un buen espectáculo para ellos".
En la IndianxWorkhorse, Brice ha cortado y estrechado el tanque de combustible original, conservando el perfil lateral pero limitándolo a una capacidad de solo 2.5 litros imprescindible para las pruebas de aceleración.
En este tipo de carrera la posición de conducción es un elemento crítico. Para optimizarla, Brice ha fabricado un bastidor auxiliar que se combina con un manillar bajo y unas estriberas de estilo dragster para inclinar al piloto hacia adelante, mantener el peso sobre la rueda delantera y evitar un inoportuno caballito a lo Mamola.
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Para mejorar aún más la tracción Brice ha diseñado un basculante de aluminio extendido que se combina con un avanzado sistema de suspensión Öhlins. Esta marca también suministra las horquillas delanteras Retro 43 y un amortiguador de dirección para garantizar el mejor agarre y estabilidad.
Por su parte, Akrapovič ha creado un sistema de escape de titanio a medida para obtener la máxima potencia y el mejor sonido posible. Esto, unido a una centralita electrónica de carreras Power Commander y un sistema de inyección de óxido nitroso MOTOREX ha incrementado la potencia hasta los 130 CV.
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De controlar la frenada se encarga el sistema de frenos 4D Aerotec de Beringer Brakes, con dos discos de 230 mm.
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