
Aprilia ha firmado su mejor campaña histórica en MotoGP, y uno de los culpables del éxito de la firma de Noale tiene nombre y apellido español: Raúl Fernández. El madrileño ha protagonizado un final de campaña por todo lo alto, cosechando su primera victoria en la clase reina durante el Gran Premio de Australia, un triunfo que Raúl remató poco después con un nuevo podio en Valencia, solo superado por su vecino de fábrica, Marco Bezzecchi.
El nivel exhibido por Raúl en estas últimas carreras ha pillado por sorpresa a la cúpula directiva de Noale, empezando por Fabiano Sterlacchini, Director Técnico de Aprilia Racing, quien no se ha escondido a la hora de evaluar el rendimiento del piloto del Trackhouse.
Al ser cuestionado sobre si entraba en sus planes ver a un Raúl tan dominador en el tramo final, la respuesta que dio Sterlacchini en Valencia fue honesta: "Sinceramente no, pero él es un piloto de gran talento y lo ha demostrado también en el pasado en las categorías menores", recoge GPone.com.
Y es que el madrileño no solo ha cumplido, sino que se ha destapado. Su evolución ha sido un in crescendo de manual que tuvo su primer aviso serio con el podio en el Sprint de Mandalika. Pero lo de Australia fue harina de otro costal. Fernández rozó la gloria el sábado y, apenas 24 horas después, regaló a la marca su victoria número 300 en el Mundial.
Sterlacchini, perro viejo en esto de las carreras, valora el salto de calidad de Raúl a la hora de gestionar su máquina. "En MotoGP la complejidad reside en controlar muchas cosas, desde el freno motor al control de tracción, de la frenada a la gestión de los neumáticos", explica el ingeniero italiano.
Su asombro va más allá, y destaca la madurez exhibida por Fernández en estos últimos meses: "Considerado el modo en el que trabaja, más allá de su velocidad, no me esperaba por su parte carreras como en Valencia o en Phillip Island", admite Sterlacchini, añadiendo que "para nosotros se ha convertido en un piloto clave y estamos contentos de esta sorpresa".

El broche de oro a esta revolución se puso en Cheste. Aprilia volvió a firmar un doblete histórico, el segundo en MotoGP tras aquel inolvidable de Barcelona en 2023. Esta vez, Raúl escoltó en el podio a un Marco Bezzecchi que ha ejercido de punta de lanza durante todo el curso. El italiano, con tres victorias en carreras largas y otras tres al sprint, ha finalizado tercero en la general, sumando 353 puntos y cinco poles.
El rendimiento global de la escudería ha superado las previsiones más optimistas. Sterlacchini reconoce que los objetivos de pretemporada eran mucho más modestos. "A decir verdad las ha excedido", comenta sobre las expectativas cumplidas, "porque teniendo en cuenta la formación que tenemos e hipotetizando no tener problemas, me imaginaba que se pudiese luchar por el 'top 5' en la general de pilotos y por la segunda plaza de constructores. Por lo tanto, muy positivo".
Gran parte de este éxito reside en cómo la fábrica ha logrado integrar el trabajo del equipo satélite. La conexión con el Trackhouse Racing ha sido fluida y constante, un factor determinante para que pilotos como Raúl hayan tenido el material y el soporte necesarios para brillar. "Al término de cada jornada hacemos una reunión con todos los técnicos de primera línea e intentamos compartir los problemas", revela el jefe técnico.
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El futuro pinta brillante para los de Noale, que ahora saben que tienen en casa más pólvora de la que creían. La gestión de los test ha sido vital para afinar la moto a gusto de cada piloto. "Al mismo tiempo establecemos test con los diversos pilotos, que es la parte más compleja del trabajo, en cuanto hace falta identificar quién es más sensible a qué y en qué se fatiga mayormente y está, por lo tanto, interesado en que se encuentre un arreglo", concluye Sterlacchini.

