BMW Motorrad ha puesto fin a la espera. Tras mostrar un prometedor prototipo en el EICMA de 2024, la firma bávara presenta la versión de producción de la BMW F 450 GS 2026, una máquina diseñada desde cero para conquistar el carnet A2 y cerrar el enorme hueco que existía entre la G 310 GS y la familia F 800.
Una de los detalles más llamativos de esta F 450 GS lo encontramos en su sistema ERC (Easy Ride Clutch). Esta tecnología, de serie en el modelo tope de gama Trophy y opcional en el resto, es una evolución del embrague centrífugo. En la práctica, el sistema desacopla el embrague automáticamente al ralentí y lo acopla al abrir gas, eliminando la necesidad de usar la maneta izquierda en salidas, paradas o cambios de marcha.
Este embrague ERC trabaja en sintonía con el asistente de cambio Shift Assistant Pro (el quickshifter bidireccional de BMW), que es de serie en casi todas las variantes. La combinación de ambos sistemas permite una conducción en la que la maneta de embrague se vuelve casi superflua, aunque se mantiene físicamente para quien desee un control manual en maniobras off-road o situaciones específicas. A diferencia de otros sistemas, BMW asegura que el freno motor se mantiene activo casi hasta la detención, evitando que el motor se cale.
El corazón que bombea detrás de esta tecnología es un propulsor completamente nuevo. Es el primer motor de 420 cc fruto de la alianza de BMW con la compañía india TVS. Se trata de un bicilíndrico en paralelo DOHC de ocho válvulas que servirá de plataforma para futuros modelos.
Pero no es un bicilíndrico convencional. Para dotarlo de un carácter único, los ingenieros han optado por un calado del cigüeñal a 135 grados, en lugar de los habituales 180 o 270. Esta configuración, asistida por un eje de equilibrado, promete un pulso distintivo y enérgico, pero filtrando las vibraciones molestas.
Las cifras de este motor están calculadas al milímetro para la licencia A2. Con una alta relación de compresión de 13:1, entrega 46.9 cv de potencia (35 kW) a 8.750 rpm y un par de 43 Nm a 6.750 rpm. Es la potencia máxima permitida por la normativa A2.
Donde la F 450 GS realmente brilla es en la báscula. Con un peso en orden de marcha de solo 178 kilos, roza el límite legal de 0.2 kW/kg del carnet A2. Esto significa que la moto ofrece, sobre el papel, la mejor aceleración y dinamismo que se puede tener sin dar el salto al carnet A completo.
Este peso pluma se consigue gracias a un chasis de nueva factura, compuesto por una estructura tubular de acero que utiliza el motor como elemento portante. Se complementa con un basculante de doble brazo fabricado en aluminio hueco, buscando la rigidez sin penalizar el peso.
En el apartado de suspensiones, la F 450 GS confía en la firma KYB. Monta una horquilla invertida de 43 mm en el tren delantero y un monoamortiguador trasero con ajuste de precarga y rebote. Las versiones Sport y Trophy permiten regulación en compresión y rebote en la horquilla delantera.
La geometría de la moto busca un equilibrio entre agilidad y estabilidad, con una distancia entre ejes corta de 1.465 mm. El conjunto rodante confirma su naturaleza trail asfáltica con capacidades camperas: monta llanta delantera de 19 pulgadas y trasera de 17. De serie, las llantas son de aleación fundida, pero también habrá llantas de radios cruzados disponibles en el catálogo de accesorios.
Para detener sus 178 kg, BMW ha montado un equipo de frenos potente. En el eje delantero encontramos un solo disco de 310 mm mordido por una pinza Brembo de cuatro pistones. En el trasero, un disco de 240 mm con una pinza flotante ByBre (la segunda marca de Brembo).
Todo el sistema está gestionado por un completo paquete electrónico. La F 450 GS incluye de serie ABS Pro (con asistencia en curva), Control de Tracción Dinámico (DTC), Control de Freno Motor (MSR) y Control de Freno Dinámico (DBC), que evita aceleraciones involuntarias al frenar.
La moto ofrece tres modos de conducción de serie: Rain, Road y Enduro. Sin embargo, a partir del acabado Exclusive, se añade el modo "Enduro Pro", una configuración más agresiva pensada para neumáticos de tacos que, entre otras cosas, permite la desconexión total del ABS en la rueda trasera.
La instrumentación está formada por una gran pantalla TFT de 6.5 pulgadas a todo color, que ya es un estándar en la marca. Ofrece conectividad completa para llamadas, música y navegación, además de visualizaciones específicas como la "Pure Ride Screen" o la "Sport Screen", que muestra datos de inclinación y actuación de los controles.
Como buena GS, la ergonomía es un pilar fundamental. El asiento estándar se sitúa a 845 mm, pero existen opciones de fábrica para rebajarlo a 830 mm o elevarlo a 865 mm con el asiento Rallye. Además, tanto la maneta de freno como la de embrague son ajustables, e incluso las palancas de cambio y de freno trasero tienen ajuste de altura para adaptarse a la conducción de pie o sentado.
En cuanto a la autonomía, el depósito de 14 litros de capacidad, combinado con un consumo homologado de solo 3.8 litros a los 100 km, permite una autonomía teórica que supera con holgura los 350 kilómetros. El mantenimiento se establece en intervalos de 10.000 km.
El diseño es inconfundiblemente GS, marcado por el nuevo faro LED que incorpora la luz diurna en forma de "X" y la característica "flyline" de la familia.
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La nueva BMW F 450 GS llegará al mercado en cuatro variantes bien diferenciadas:
- Basis: En color Cosmic Black. A la venta en España por 7.390 euros.
- Exclusive: También en Cosmic Black, pero añade estriberas off-road, protectores de manos, cubre cárter de plástico, los modos Pro, el Quickshifter y una pantalla clara. Su PVP es de 7.716 euros.
- Sport: En Racing Red, suma a lo anterior la suspensión deportiva KYB totalmente ajustable. Cuesta 7.878 euros en nuestro país.
- Trophy: La tope de gama en Racingblue metallic, que incluye todo lo anterior más una pantalla Rallye tintada, cubre cárter de aluminio y, como joya de la corona, el embrague automático Easy Ride Clutch (ERC) de serie. Su precio en España será de 8.226 euros.
