![]() @sukosomoza |
La crisis que Pecco Bagnaia está atravesando este año es uno de los temas más comentados dentro del paddock. El turinés siempre ha sido un piloto al que le ha costado coger ritmo durante las primeras carreras, pero siempre ha acabado alcanzando su velocidad de crucero para luchar por el título en la segunda mitad de cada campaña, como ya hizo en 2022, 2023 y 2024.
Este curso, sin embargo, la dinámica es muy distinta. Bagnaia empezó la temporada consiguiendo algunos resultados decentes, luchando con los hermanos Márquez en la mayoría de pistas y logrando incluso una victoria en el feudo del #93, el Gran Premio de Las Américas. Sin embargo, con el paso del tiempo, Pecco se encontró con un muro técnico y psicológico que ha mermado notablemente su rendimiento, especialmente tras el parón estival.
Con solo 24 puntos sumados en las últimas tres rondas -frente a los 106 de Marc Márquez y los 44 de Álex-, el turinés atraviesa su peor momento desde que aterrizó en el Ducati Lenovo Team, y lo más preocupante es que, a corto plazo, parece difícil que su confianza con la moto mejore, depositando ya todas sus esperanzas en un 2026 en el que Bagnaia estará obligado a recuperar su mejor versión.
Durante la última entre del programa DURALAVITA, Rubén Xaus ha ofrecido algunos detalles interesante sobre lo que está pasando en Ducati con Pecco Bagnaia. El expiloto catalán ha contado que estuvo "con Tardozzi a las 07:30 de la mañana, entrando al paddock de Montmeló. Ha sido mi jefe de toda la vida, y estuvimos hablando. Muchos de mis mecánicos de la épocas de Superbikes han ido recalando en MotoGP, y les conozco desde hace mucho tiempo. Y me dice 'la GP24 y la GP25 es la misma moto, olvídate, hay tres cosas pequeñas, algo de electrónica y dos tonterías más, no hay nada de geometrías, de verdad'".
Tras conocer esta información, Xaus fue directo con Tardozzi, y le dijo "pues tienes un problema muy grande con Bagnaia", a lo que el tea manager del Lenovo Team solo puso asentir y responder "Sí, lo tenemos", a lo que además se suma "una gran presión mediática" según Tardozzi.
Repasando lo ocurrido desde el pasado mes de marzo, Xaus recuerda que "Pecco empieza el año y Marc ya le pasa por encima. Se quiere adaptar y no lo hace. Luego ve que el tiempo se le viene encima y pide cambios. Pide la GP24, pero cuando un piloto se sube a la GP25 y se quiere adaptar, ya cambia su manera de pilotar. Cuando lleva siete carreras y pide la 24, ya no puede hacerlo bien con ella, porque se ha medio adaptado a la 25".
"Todo esto hace que se frustre", cree Xaus, "y empieza a hablar mal del equipo, porque en el box tienen micrófonos, y esto está pasando factura. Esto es muy malo, porque al final, aunque tú seas Ducati fábrica, ellos sufren esa infelicidad que hay dentro del box. Pecco es muy noble, pero cuando esto reviente, puede hacerlo de mala manera", vaticina el de San Cugat del Vallés.
Para Xaus, Bagnaia no tiene la capacidad de adaptación de la que siempre ha presumido Marc Márquez, posiblemente el piloto que mejor sabe dejar atrás los problemas de una moto a la hora de ser competitivo: "Álex Márquez, con la GP22, le fue tan bien que cuando legó llegó la 23 se esperaba una moto mucho mejor, y se encontró con una moto mucho más crítica, y se supo adaptar menos y cometió más errores. Marc venía de una moto muy crítica, la Honda, se subió a la Ducati y le dio igual que fuera la peor Ducati. La peor Ducati era 10 veces mejor que la mejor Honda. Marc entró de cero y puso parte suya cuando se vio delante".
Leer también: El equipo de Valentino Rossi no quiere "poner palos en las ruedas" a Álex Márquez
Y para remarcar esa capacidad del #93 a la hora de ser rápido casi con cualquier cosa que tenga entre las piernas, recuerda una conversación que tuvo con uno de los ingenieros de Márquez hace unos días, con motivo del Gran Premio de Catalunya: "Estuve desayunando con el técnico de Marc, y me decía 'Rubén, es que Marc no pide nada, llega a la moto y se adapta'", una frase que sin duda resume una de las grandes cualidades del piloto de Cervera.