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Un revitalizado Pecco Bagnaia ha aprovechado sus vacaciones estivales para descansar y, de paso, analizar los motivos que le han llevado a cuajar una primera mitad de temporada muy por debajo del nivel exhibido por su compañero de equipo, un Marc Márquez del que ahora mismo le separan 168 puntos en la general.
Las playas de Cerdeña han sido el escenario en el que Pecco ha repasado algunas de sus carreras del pasado para entender por qué no consigue sacar todo el potencial de la Desmosedici GP25, un prototipo que, de acuerdo a sus palabras, poco tiene que ver con el ADN ducatista al que estaba acostumbrado desde su llegada a MotoGP en la temporada 2019.
A las puertas de su jardín particular, el Gran Premio de Austria -donde lleva arrasando tres temporadas-, Bagnaia reconocía este jueves que, tras un análisis concienzudo de su situación se ha dado cuenta de que "mi estilo de pilotaje no se adapta a esta moto", y aunque con el paso de las carreras ha ganado algo de confianza, lamenta que sus problemas "sigan siendo los mismos desde principios de año".
Durante los últimos días, Bagnaia ha repasado "algunas carreras entre 2021 y 2024" para ver dónde está fallando. "Vi lo bien que frenaba, adelantaba y seguía a otros. Luego vi algunas carreras de este año y parecían dos pilotos completamente diferentes en la pista. Al ver esos vídeos, me di cuenta de que mi estilo de pilotaje no se adapta a esta moto, se nota que no tengo confianza en ella", es la conclusión del turinés.
Consciente de que, desde el lado mecánico, Ducati no puede ayudarle más, Bagnaia asume que tendrá que "cambiar mucho mi estilo de pilotaje" en esta segunda mitad de temporada si quiere aspirar al subcampeonato, dando casi por pérdidas sus opciones al título.
El piloto del Ducati Lenovo Team cuenta que "el ADN de esta nueva moto ha cambiado, es completamente diferente a lo que era en 2019, cuando llegué a MotoGP y Ducati. Tengo que cambiar por completo mi forma de frenar, y es muy extraño para mí, pero lo estoy intentando".
Cree que "Marc se ha adaptado perfectamente a esta moto", y uno de los motivos es que el catalán "nunca había pilotado la GP24" y, por lo tanto, no había adquirido los vicios de la moto del año pasado. "Creo que por eso también se sintió mejor enseguida con ella", opina Pecco, añadiendo que "además la moto se adapta muy bien a su estilo de pilotaje. En mi caso, es diferente, pero quiero trabajar en mí mismo para lograrlo".
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Además de cambiar su estilo de pilotaje, Pecco cree que tanto él como su lado del box necesitan "cambiar nuestro enfoque" durante los fines de semana con un único objetivo: "Recuperar la velocidad, ese es mi principal objetivo. Y luego llegarán los resultados, pero primero necesito volver a sentirme cómodo con la moto y no tener que luchar más con ella".
