.jpg) Javier OrtegaRedactor |
Pocas motos hay tan icónicas en el mundo del cine como la Kawasaki roja y negra que Tom Cruise utilizó durante el rodaje de Top Gun. Estrenada en mayo de 1986, los productores de la película querían que su protagonista luciera la moto más rápida del momento, en sintonía con su carácter y su talento a los mandos de un caza de combate, y la apuesta fue clara.
Durante parte de la década de los 80, la Kawasaki GPZ900R fue la máquina más rápida sobre el asfalto. Su motor de cuatro cilindros en línea y 908 cc entregaba la nada despreciable cifra de 116 cv de potencia a 9.500 vueltas, una caballería que permitía a esta GPZ900R alcanzar los 255 km/h de velocidad punta, números muy serios para una motocicleta cuya producción arrancó en el año 1984.
La GPZ900R tuvo un protagonismo destacado en la primera entrega de Top Gun, no en tanto en su secuela, Top Gun Maverick, donde Tom Cruise aparece subido a otra Kawasaki de altos vuelos, la Ninja H2, aunque la GPZ900R también tiene alguna aparición aislada.
Convertida en un objeto de deseo para miles de motoristas que crecieron en los 80 y los 90, la casa de subastas Iconic Auctioneers va a ofrecer próximamente una réplica exacta de la GPZ900R Top Gun, un modelo que copia hasta el último tornillo de la moto original, incluyendo todas sus pegatinas.
La moto recibió una restauración muy seria en 2022; su dueño se dejó miles de libras en devolver una vieja GPZ900R a la vida, y qué mejor forma de recuperar un mito que pintarla con los colores de la moto con la que Tom Cruise desafiaba a los cazas F-14 acelerando a fondo frente a ellos.
Toda la moto ha sido restaurada para dejarla casi como salida de fábrica; los plásticos se han reacondicionado o bien se han cambiado por unos nuevos, el motor se desmontó por completo para limpiarlo a fondo y cambiar las piezas de mayor desgaste, y todas las piezas metálicas han sido pulidas hasta dejarlas con su brillo original.
El resultado es una auténtica cápsula del tiempo, una motocicleta que nos pide a gritos una chupa de cuero y unas Ray-Ban Aviator mientras aceleramos a fondo su motor de cuatro cilindros por encima de las 9.000 rpm. Esta unidad tan especial será subastada en el Circuito de Silverstone el próximo de agosto, y según la casa de subastas, su precio podría alcanzar los 8.000 euros.
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