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Marco Bezzecchi ha vuelto a confirmar en Brno que la Aprilia es, después de todopoderosa Ducati, la segunda mejor moto de la parrilla. El de Rimini ha firmado en Brno su tercer podio dominical del año -además de otros dos podios en Sprint-, y aunque cree que la RS-GP todavía está lejos del rendimiento de la Desmosedici, ha valorado de forma muy positiva el crecimiento del prototipo de Noale, un trabajo que Bezzecchi ha tenido que realizar casi en solitario tras la baja por lesión de Jorge Martín.
El piloto del equipo Aprilia Racing llegó a liderar por momentos la carrera principal del Gran Premio de la República Checa. Primero se quitó de encima a Pecco Bagnaia, y tras mantener a raya a Marc Márquez durante un puñado de vueltas, finalmente Bezzecchi se tuvo que rendir ante la superioridad del #93, dando por buena su segunda posición final.
"Al principio de la carrera estaba controlando un poco la situación, porque sabía que si intentaba seguir a Marc, no tendría la energía para seguirle al final", explicó Marco al acabar la prueba. "Quedaban muchas vueltas, y en una pista con curvas tan largas como esta, era importante guardar munición para el final. Cuando vi que Pedro se acercaba, supe que era el momento de usarla, así que mis tiempos mejoraron y me despegué de él".
Bezzecchi parece haber encontrado su mejor versión desde Silverstone, donde se estrenó en el podio a lo grande, ganando la carrera dominical del Gran Premio de Gran Bretaña. Antes de esa fecha, sin embargo, sus pobres resultados empezaron a sembrar dudas en su cabeza: "Ha sido un comienzo de año extraño. Todos saben lo que pasó: la lesión de Jorge, tener que desarrollar la moto, y no quiero decir solo, porque Savadori y los chicos de Trackhouse me ayudaron, pero sobre todo tuve que trabajar. Luego llegó ese momento en el que el rendimiento estaba ahí, pero los resultados no llegaban".
Él mismo reconoce que "a menudo dudaba de mí mismo, fue muy duro hasta Silverstone", y poco ayudó su último año con la Ducati del VR46, muy por debajo de lo que se esperaba de él: "El año pasado tampoco fue fácil, echaba de menos estar delante. La clave estaba en trabajar con calma y bien. Los chicos han estado genial, y hemos aprovechado al máximo el trabajo que hemos hecho hasta ahora, y está funcionando".
Bezzecchi ve a Aprilia "más cerca" de las Ducati en rendimiento, aunque insiste en que "las Ducati siguen siendo más fuertes, sobre todo en la gestión electrónica, que implica la gestión de los neumáticos. Terminan la carrera un poco mejor que nosotros, aunque nuestra moto sigue siendo muy buena en ese aspecto. Creo que tenemos que esperar hasta final de año para sacar conclusiones, así que no sé qué decir ahora. Pero al mismo tiempo, hemos mejorado mucho y también tenemos que conseguir lo que merecemos".
Por último, valorando su primera mitad de año con Aprilia, el piloto italiano celebra su clara línea ascendente, una progresión que le ha catapultado hasta la cuarta posición de la general del campeonato, superando en Brno a las Ducati de Fabio Di Giannantonio y Franco Morbidelli, quinto y sexto respectivamente.
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"Diría que los resultados son un poco mejores de lo que esperaba a principios de año", resume Bezzecchi. "Ciertamente, después de ver cómo fueron las primeras carreras, hubo momentos en los que esperaba conseguir uno o dos podios a lo largo del año. Sin embargo, logramos revertir la situación, y obviamente aún quedan muchas carreras, así que nos tomaremos un descanso, pero necesitamos mantener este impulso, mantener la motivación y la concentración".
