.jpg) Javier OrtegaRedactor |
Álex Márquez ha sumado su tercer cero del año en Brno. Tras las caídas que sufrió en las carreras largas de Le Mans y Assen, el piloto catalán no ha podido entrar este sábado en la zona de puntos en la Sprint Race de la República Checa, un 17º puesto en el que mucho tuvo que ver la patinada que sufrió el menor de los Márquez en la salida.
Tras clasificarse en la octava posición durante la Q2, el piloto de Gresini confiaba en que su ritmo le llevaría hoy cerca del podio; sin embargo, nada más apagarse el semáforo, una inesperada derrapada dejó clavado a Álex Márquez en la parrilla, y cuando llegó a la primera curva ya estaba en la cola de un pelotón del que no pudo escapar.
Las cámaras de televisión captaron el momento en el que su hermano Marc, nada más acabar la vuelta de warm-up, tiraba un tear-off del casco y este terminaba justo en la posición de salida de Álex. Desde fuera parecía que esa lámina pudo ser la causante de la mala arrancada del menor de los Márquez, aunque el propio piloto parece desmontar esta teoría.
"No sé si ha sido un tear-off o no", declaraba en DAZN el dorsal #73. "Es verdad que me he peleado con un tear-off nada más llegar, porque había uno en mi casilla. Tenía el #93 (risas). Lo he tirado a un lado, así que creo que no ha sido eso".
Para Álex Márquez resulta "raro" el hecho de "haber sido el único que ha patinado", y es algo que quiere estudiar junto a su equipo: "Creo que no ha sido el tear-off porque lo he apartado yo. A partir de ahí he salido desde detrás y me lo he tomado con calma, he dicho 'aquí no hay que cometer errores'. Quería acabar la carrera, tampoco tenía un gran feeling. Ahí detrás, con todo el tren, era complicado".
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— MotoGP™🏁 (@MotoGP) July 19, 2025
El resumen del piloto de Cervera es contundente: "Hemos tirado la Sprint a la basura en la salida, pero tenemos información de cara a mañana, a ver si podemos ser más rápidos".
Además de sus problemas en la salida, el de Gresini también ha tenido algún que otro encontronazo en el primer sector de Brno al poco de apagarse el semáforo, llegando incluso a tocarse con su compañero de filas, Fermín Aldeguer: "He hecho la curva 1 con demasiada precaución y me han pasado dos pilotos. Cuando he llegado a la tres, sinceramente, he dudado porque era mi compañero, de pasarle o no. Y cuando dudas con estas motos, es cuando la cagas. Él tenía delante a Oliveira, ha habido algo de lío frenando y nos hemos tocado. Después de la carrera he ido a pedirle perdón, y me ha dicho 'no, perdona yo', ha habido algo raro. Se ha quedado en un susto".
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Lejos de sacar algo en positivo para la carrera de mañana, Álex Márquez solo quiere olvidar lo ocurrido hoy en Brno: "Cuando estás en un grupo así, todas las sensaciones son malas. El neumático se calienta, todo es difícil. No ha sido una carrera de buenas sensaciones. He tenido muchas vibraciones con el neumático trasero. Quizás era una goma que no estaba bien o nuestro setup, no quiero señalar lo que es".
