 Por Alfonso Somoza @sukosomoza |
Fuera del plano deportivo y de toda la polémica surgida a raíz de su decisión de dejar Aprilia, Jorge Martín ha pasado los meses más duros a nivel personal desde que compite profesionalmente en el Mundial de Motociclismo. Las graves secuelas que le dejó su accidente en Qatar le obligaron a guardar reposo durante tres meses, una agónica espera que, lógicamente, afectó al madrileño a nivel mental, especialmente durante los primeros días en los que estuvo ingresado en el hospital.
Este pasado jueves, durante la rueda de prensa excepcional que Martín ofreció en Brno, el dorsal #1 confesó que, durante su estancia en el hospital tras el grave neumotórax que sufrió en Losail, pasaron todo tipo de ideas por su cabeza, incluyendo su retirada al no verse capaz de recuperar la confianza necesaria para subirse a una máquina de casi 300 cv de potencia.
"Creo que la confianza en mí mismo me costó un poco cuando estuve en el hospital en Qatar", declaró el de Aprilia. "Pero creo que he entrenado perfectamente, estoy más preparado que nunca. El coraje que tengo… no sabía cuánto coraje tengo y ahora sé que está dentro de mí y lo tendré durante toda mi carrera".
Las dudas sobre su competitividad fueron lo que más tocaron la moral del madrileño, que antes de su accidente en Qatar ya venía de dos lesiones anteriores, una durante los IRTA de Malasia y otra mientras entrenaba en un karting con su supermotard: "Cuando estuve en el hospital, no sabía si podría volver a subirme a una moto. Ese era el principal problema. Estuve en la UCI cuatro días y fue un momento muy difícil".
Lejos de guardarse todas esas dudas para él mismo, Jorge habló de sus preocupaciones con su entorno más cercano: "Hablaba con mi novia, con mi padre, con Aleix (Espargaró) algunos días, y dudaba si era capaz de volver a una MotoGP, si volvería a ser rápido, a ser fuerte, muchas cosas en el aspecto profesional".
Martín, que en el pasado ya tuvo que superar lesiones serias como las que sufrió en su año de debut en MotoGP tras caerse en Portugal, reconoce con la voz entrecortada que "nunca estás preparado para estar cerca de morir. En la vida tienes que afrontar mucha situaciones, y algunas no las esperas, llegan y son muy difíciles de aceptar. Y Qatar fue una de ellas. Yo estaba en una situación muy mala, solo mi padre y mi novia saben lo que me pasaba por la cabeza en ese momento", explicó tras hacer una parada para contener las lágrimas.
Durante su convalecencia, Jorge recibió numerosos mensajes de sus compañeros en MotoGP. Uno de los más especiales, quizás por el significado y la experiencia que aportaba, fue el que le envió Marc Márquez cuando Martín todavía estaba ingresado en el hospital de Losail: "Recibí un mensaje de Marc. Me dijo que no tomara ninguna decisión mientras estuviera lesionado. Mirándolo hacia atrás, creo que fue el mejor consejo que me dieron", reveló el madrileño, asegurando que "retirarme" era una de las opciones que "estaban en su cabeza" en ese momento.
Leer también: Canet, cerca de irse a Superbikes: "Me entristece no haber tenido nunca ofertas de MotoGP"
Marc Márquez, por su parte, también ha valorado de forma muy positiva el regreso de Martín a la parrilla. El de Cervera ha dicho en Brno que tener al madrileño de vuelta "es bueno para MotoGP, para el campeonato, para Aprilia y sobre todo para él que vuelva a pista. El carenado con el número 1 volverá a estar ahí. Lógicamente le llevará un tiempo, o quizás no, quién sabe con Martín, pero será rápido en la segunda mitad de la temporada".
