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Toprak Razgatlioglu ya tiene un pie fuera del Mundial de Superbike y otro apuntando a MotoGP. Mientras en Misano se corre una nueva ronda del campeonato, el piloto turco empieza a despedirse de lo que ha sido su casa durante años. Y aunque el salto al Mundial de los prototipos con Yamaha y el equipo Pramac suena a premio gordo, no todo es alegría: hay algo de nostalgia en el ambiente.
"Estoy triste porque siento que WorldSBK es como parte de mi familia", confesó este jueves el piloto turco, que no es precisamente de los que suelen derramar muchas lágrimas. "Conozco a todo el mundo, estoy realmente a gusto en el paddock. ¡Voy a echar de menos a todos! No solo las carreras, sino especialmente a los equipos". Y es que, más allá del talento sobre la moto, Toprak es de esos que siempre están de charla en los boxes, con una sonrisa y una anécdota a mano.
Pero no todo es añoranza. También hay ilusión. "Estoy feliz por ir a MotoGP", reconoció el bicampeón de Superbike. "Ojalá poder llegar como tricampeón de WorldSBK, es mi mayor sueño para este año". Y no es una quimera. Actualmente, está a 31 puntos de Nicolò Bulega, con todo el segundo tramo de la temporada aún por disputarse.
“Esta es mi última campaña con BMW y necesito darles algo antes de marcharme a MotoGP. Este año todo es diferente”, añadió con determinación. Y sí, las cosas han cambiado: Toprak está más cerca del podio que nunca con la montura alemana y, si la temperatura no le juega una mala pasada en Misano, sigue siendo uno de los favoritos.
La decisión de marcharse a MotoGP no fue impulsiva, aunque la discreción ha sido parte del proceso. "No puedo decir nada en cuanto a cuando Pavesio vino a Turquía", explicó Toprak al hablar del interés de Yamaha y la visita que recibió el director general de Yamaha Racing. "Siempre hemos sido amigos, me escribía después de cada carrera. Pero en esta situación es mejor preguntar a Sofuoglu. Él se ocupó de las negociaciones. Yo me centré en pilotar".
¿Y por qué Yamaha, precisamente ahora, cuando la marca de Iwata lleva unos años sin levantar cabeza? El turco lo tiene claro: "Hemos visto que la Yamaha ha comenzado a mejorar y el próximo año podría incluso tener un nuevo motor. La cosa más importante para mí es estar en MotoGP". Aunque lo más curioso es que decidió no esperar al cambio de reglamento de 2027, cuando todo se revolverá (desde motores hasta neumáticos), y prefirió debutar antes. “La cosa importante para mí era aprender a conocer el paddock, las pistas que no conozco y adaptarme a la nueva atmósfera”, confesó.
Eso sí, todavía hay muchas incógnitas sobre su futuro inmediato. Por ejemplo, cuándo podrá probar la M1. “No lo sabemos aún. Es demasiado pronto para hablar de eso, todavía quedan varias carreras. Quizás en seis meses. Veremos en los próximos días”. Y también está en el aire si su actual jefe técnico en BMW le acompañará en la aventura: “Estamos hablando de ello y parece posible”.
Entre las preocupaciones más curiosas de Razgatlioglu de cara a MotoGP no está ni la velocidad punta ni la electrónica. No, lo que le quita el sueño es… ¡la posición en la moto! "Mi principal preocupación es fácil: la posición en la moto. Hablamos de ello antes de la firma. Me dijeron que probablemente tendría más de veinte opciones esta vez", dijo riéndose, admitiéndole que "MotoGP será completamente diferente, y creo que el primer será duro para mí".
Y claro, en MotoGP no todo es pista. Hay focos, entrevistas, redes, y un nivel de exposición mediática al que no está acostumbrado. “Al momento no estoy listo, pero ya veremos. No me gusta hablar mucho, pero en MotoGP todo es diferente y quizás tenga que aprender”.
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Ah, y luego está el tema del número. Su tradicional dorsal 54 ya lo usa Fermín Aldeguer, así que podría haber trato a la vista. “¿Pagarle a Fermín? No lo sé. No he hablado con él, ¡pero por qué no?!”, bromeó Toprak. Aunque también dejó caer que tiene alguna alternativa en mente.
