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El mercado de pilotos de MotoGP para la temporada 2026 ha entrado en ebullición de forma prematura y con una intensidad sísmica. Jorge Martín, el vigente campeón del mundo, ha confirmado hoy su intención de explorar una salida del equipo Aprilia Racing al finalizar la presente campaña 2025, a pesar de tener un contrato en vigor. Esta decisión, que según el propio piloto se fundamenta en una presunta cláusula de rendimiento, abre un abanico de posibilidades y pone en alerta a varias estructuras de la parrilla, con Honda HRC como el destino que suena con más fuerza en el paddock.
Si la prioridad de Martín sigue siendo un asiento de fábrica, una condición que le llevó a firmar por Aprilia tras ser descartado por el equipo oficial Ducati en favor de Marc Márquez, la opción más clara y, según los rumores, su preferida, sería el equipo oficial Honda HRC. Allí encontraría un puesto junto a Joan Mir y contaría con el apoyo de su amigo Aleix Espargaró como piloto de pruebas.
Sin embargo, esta plaza es altamente codiciada, con Johann Zarco (ganador en Le Mans y actualmente en LCR) en conversaciones avanzadas, y Luca Marini también negociando su renovación. Aunque Alberto Puig, jefe de HRC, ha insistido en que no negociarán con pilotos bajo contrato, la puerta podría abrirse si Martín logra desvincularse de Aprilia; y Puig ya dijo hace unos días que Jorge sería un piloto interesante por su velocidad y talento.
¿Y un regreso al nido de Pramac Racing? Sería una carambola sorprendente, ya que el equipo que le vio crecer y con el que se proclamó campeón del mundo como independiente, ahora forma una nueva alianza con Yamaha. En Pramac existe, teóricamente, una vacante, ya que el contrato actual de Jack Miller es solo por una temporada. No obstante, el australiano parece haber rejuvenecido con su regreso a Pramac, retando a menudo a Fabio Quartararo por ser la mejor M1, y representará a Yamaha en las 8 Horas de Suzuka.
Además, el futuro de su compañero Miguel Oliveira es incierto, y el cotizado Toprak Razgatlioglu también está fuertemente vinculado a un asiento en esta estructura de Yamaha.
Otra vía para reencontrarse con la Desmosedici, la moto que le hizo campeón y con la que sumó ocho victorias y 32 podios, sería el equipo Pertamina Enduro VR46. Actualmente, Franco Morbidelli tiene un acuerdo por un año (2025) con el equipo de Valentino Rossi. Sin embargo, para Martín supondría un importante giro en sus aspiraciones, ya que abandonó la esfera Ducati precisamente por no obtener un asiento de fábrica.
Volver a un equipo satélite, incluso si Ducati le ofreciera una GP26, le situaría en una posición similar a la que ya tuvo en Pramac. Este asiento también ha sido vinculado a una posible continuidad de Morbidelli o al interés por Pedro Acosta.
Finalmente, dentro de la esfera Honda, existiría una segunda opción con pleno apoyo de fábrica: el equipo LCR Honda Castrol. Si Johann Zarco asciende al equipo oficial HRC, su vacante en el equipo de Lucio Cecchinello podría ser una alternativa. Incluso la segunda moto del LCR, actualmente ocupada por el debutante Somkiat Chantra (quien tiene una opción para 2026), podría entrar en juego.
No obstante, cualquier asiento en un equipo satélite, aunque con respaldo de fábrica, supondría probablemente un considerable paso atrás en términos económicos comparado con su actual contrato de piloto oficial Aprilia.
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Si la separación de Jorge Martín y Aprilia se consuma, el asiento junto a Marco Bezzecchi en la escudería de Noale se convertiría instantáneamente en uno de los más codiciados del paddock. Nombres como Luca Marini, Franco Morbidelli, Jack Miller, e incluso Enea Bastianini o una promoción interna de Ai Ogura, surgirían como candidatos.
