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¿Una deportiva de 80 CV, con un espectacular basculante monobrazo, chasis de aluminio, suspensiones Showa totalmente ajustables, frenos Brembo radiales y un completo equipamiento tecnológico que incluye pantalla TFT, arranque sin llave y control de presión de neumáticos, todo ello por menos de 7.500 euros? Suena a utopía, pero es la carta de presentación de la nueva MITT 775R, una ambiciosa propuesta "Made in China" con la que la marca española busca revolucionar el segmento de las deportivas de media cilindrada.
El corazón de esta nueva máquina es un motor bicilíndrico en línea de 730 cc y refrigeración líquida, capaz de entregar 79 cv a 8.000 rpm y un generoso par de 72 Nm a 6.900 rpm. Para asegurar un rendimiento deportivo y fiable, MITT ha contado con la colaboración de la prestigiosa firma suiza Suter Racing en el desarrollo de esta mecánica, conocida por su extenso historial en el mundo de la competición, incluyendo Moto2.
El atractivo y agresivo diseño exterior, por su parte, es obra del reconocido estudio italiano Marabese Design, que ha dotado a la 775R de una estampa imponente y moderna.
Pero donde la MITT 775R realmente quiere marcar la diferencia es en su parte ciclo y equipamiento, ofreciendo componentes que habitualmente se reservan a motocicletas de precio muy superior. El chasis es una robusta estructura doble viga fabricada en aluminio, complementada por un llamativo basculante monobrazo, también en aluminio, que no solo aporta rigidez sino un innegable toque de distinción y alta gama.
Las suspensiones están firmadas por el especialista japonés Showa, y son de primer nivel: delante encontramos una horquilla invertida totalmente ajustable (precarga, compresión y extensión), y detrás un monoamortiguador con sistema progresivo de bieletas, igualmente multirregulable. Para detener sus 80 cv, MITT confía en la solvencia de Brembo, con un potente equipo delantero compuesto por doble disco de 320 mm y pinzas radiales de cuatro pistones, asistido por un sistema ABS de dos canales Bosch.
El equipamiento tecnológico de serie es otro de sus grandes argumentos de venta, especialmente considerando su ajustado precio. La MITT 775R incluye de fábrica una completa pantalla TFT a color de 5 pulgadas con conectividad Bluetooth para el smartphone (permitiendo visualizar notificaciones y usar funciones de navegación), sistema de arranque sin llave (Keyless), monitorización de presión de neumáticos (TPMS) para mayor seguridad, un práctico puerto de carga USB tipo A y piñas de conmutadores retroiluminadas.
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Por los 7.495 euros que cuesta esta deportiva de marca española, fabricación china y corazón suizo, la marca se posiciona con una de las relaciones calidad-precio-prestaciones más agresivas y tentadoras del mercado actual para aquellos que buscan una deportiva de media cilindrada completa, efectiva y con una imagen impactante.
