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El Gran Premio de Francia celebrado este fin de semana en Le Mans dejó un sabor agridulce en el box del Honda Castrol Team. Mientras Johann Zarco devolvía a la RC213V al escalón más alto del podio ante una grada entregada, Joan Mir terminaba en el hospital tras una aparatosa caída y Luca Marini veía cómo una serie de decisiones estratégicas lo alejaban del top 10.
La incertidumbre volvió a apoderarse del paddock justo antes del inicio de la carrera, cuando la lluvia hizo acto de presencia en el circuito de La Sarthe. Tras completar la vuelta de calentamiento, todos los pilotos se dirigieron a boxes para cambiar neumáticos, lo que obligó a dirección de carrera a mostrar la bandera roja y ordenar un reinicio rápido. El nuevo procedimiento redujo la carrera a 26 vueltas.
Luca Marini comenzó la prueba con neumáticos de lluvia, pero en la segunda vuelta optó por cambiar a slicks, una decisión que pronto se reveló equivocada cuando la pista volvió a mojarse. Obligado a entrar de nuevo en la vuelta ocho para montar de nuevo los neumáticos de lluvia, el italiano se vio relegado a las últimas posiciones. Desde allí, logró remontar hasta la undécima posición, quedándose a las puertas del top 10.
El propio Marini no ocultaba su frustración tras la bandera a cuadros: “Primero, felicitar a Honda HRC y a Zarco por el resultado, todos hemos estado trabajando muy duro para lograrlo. Hoy había una gran oportunidad y, sinceramente, estoy realmente frustrado porque tomé casi todas las decisiones en el sentido contrario. Es una gran lástima, por supuesto, después de la carrera es fácil decir ‘quedarse con los neumáticos de lluvia habría sido lo mejor’, pero hice una muy buena salida y éramos rápidos, aunque el clima cambió una y otra vez. Tenía buenas sensaciones cuando todo se estabilizó y pude ser bastante rápido, pero perdimos demasiado tiempo con los cambios. Sin estos errores, Zarco mostró lo que era posible”.
La peor parte del domingo fue para Joan Mir. El balear no pudo completar ni una sola vuelta al verse involucrado en una caída múltiple junto a Bagnaia, Zarco y Bastianini en la primera chicane. El campeón del mundo de 2020 fue trasladado al hospital local para someterse a pruebas médicas, donde se confirmó que sufría una pequeña fractura en la mano derecha y dolor cervical, aunque quedó descartada cualquier lesión de gravedad.
Tras recibir el alta, Mir regresó a casa para continuar con su recuperación y está a la espera de nuevas evaluaciones médicas en los próximos días.
Quien sí pudo celebrar por todo lo alto fue Johann Zarco, que firmó una victoria histórica para Honda LCR. El piloto francés, ante la mirada de una afición entregada, se convirtió en el primer ganador con la RC213V desde el Gran Premio de las Américas de 2023. Un triunfo que desató la locura en Le Mans y que permitió a Honda escalar hasta la segunda posición en el Mundial de Constructores, superando a KTM por nueve puntos.
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En la clasificación general de pilotos, la situación sigue siendo complicada para los representantes del equipo oficial Honda. Luca Marini ocupa la 13ª posición con 37 puntos, mientras que Joan Mir es 19º con 12 puntos. Ambos están muy lejos de un Johann Zarco que, con 72 puntos, se consolida como el mejor piloto de la marca y sexto en la tabla provisional del campeonato.
