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Pedro Acosta ha sido intervenido quirúrgicamente de forma inesperada este martes por la tarde para tratar una molestia persistente que venía arrastrando en su antebrazo derecho. El equipo Red Bull GASGAS Tech3 confirmó la operación a través de un escueto comunicado en el que señala: "Pedro Acosta ha sido operado con éxito esta tarde de su antebrazo derecho para tratar el síndrome compartimental crónico. Permanecerá en observación durante 24 horas y se espera que regrese para el GP de Francia, a la espera de una revisión médica la próxima semana".
La intervención quirúrgica, destinada a solucionar el habitual síndrome compartimental crónico o "arm pump", tuvo lugar apenas 24 horas después del test post-GP realizado en el Circuito de Jerez, donde el piloto murciano finalizó en quinta posición. El domingo, en el Gran Premio de España, cruzó la línea de meta en séptima plaza, consolidando así su mejor resultado en lo que va de temporada en la categoría reina.
El síndrome compartimental es una afección habitual entre los pilotos de MotoGP, provocada por las enormes exigencias físicas que se concentran en el tren superior, especialmente en el antebrazo derecho, encargado de controlar tanto el freno delantero como el acelerador.
La presión que se acumula en esa zona por el uso intensivo durante las frenadas puede derivar en pérdida de fuerza, entumecimiento y dolor, lo que dificulta enormemente el pilotaje al más alto nivel. De hecho, es una dolencia tan común en el paddock que casi todos los pilotos oficiales han pasado en algún momento por el quirófano para solucionarla.
El equipo confirmó que Acosta permanecerá bajo observación médica durante 24 horas tras la operación. La evolución durante los próximos días será clave para determinar si podrá regresar a tiempo para el Gran Premio de Francia, que se disputará en el circuito de Le Mans del 9 al 11 de mayo. La participación del piloto español está sujeta al visto bueno médico que deberá recibir la próxima semana.
A sus 20 años, Pedro Acosta se encuentra actualmente en la décima posición de la clasificación general del campeonato, en una temporada marcada por ciertos contratiempos técnicos en el seno de KTM. Tras haber probado sin éxito las especificaciones de la RC16 de 2025, el murciano regresó a la versión de 2024 en Qatar, en busca de una configuración que le ofreciera mejores sensaciones.
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De momento, el piloto de Mazarrón centra todos sus esfuerzos en recuperarse lo antes posible para llegar en condiciones óptimas a la próxima cita del calendario. En función de cómo responda su brazo derecho en los próximos días, los médicos decidirán si está en condiciones de afrontar el exigente trazado de Le Mans.
