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Tras su histórica victoria en el Gran Premio de España, Álex Márquez apenas tuvo tiempo para celebraciones. El piloto de Gresini Ducati regresó a la pista este lunes en Jerez para completar una exigente jornada de test, enfocándose exclusivamente en ajustes de configuración. Sin novedades técnicas en su moto, una GP24 del año anterior, el actual líder del Mundial prefirió concentrarse en afinar detalles de cara a las próximas citas del campeonato.
"Ha sido un final de fin de semana particular", explicó Álex. "No ha sido fácil asimilar lo que conseguimos ayer. Pero no he exagerado en la celebración, después de todo teníamos test". En pista, las condiciones de agarre sorprendieron incluso a los pilotos más experimentados. "Hoy en pista la adherencia era altísima, era increíble", reconoció el piloto del equipo Gresini.
Aunque Ducati suele destacar en tracción, el exceso de agarre obligó a Márquez y su equipo a realizar ajustes específicos: "De norma tenemos un setup base que tiene mucha tracción ya de por sí, entre las Ducati somos los mejores en este aspecto, pero en condiciones como la de hoy nos cuesta, tanto para plegar la moto como para tener un buen equilibrio. Así que hemos trabajado en la electrónica para estar preparados para situaciones como esta. Tener demasiado grip es un problema, así que hemos hecho algunas modificaciones radicales para ver qué dirección tomar en estos casos".
Convertirse en líder del campeonato ha sido un impulso anímico para el menor de los Márquez, que, sin embargo, mantiene los pies en el suelo. "Para nosotros fue un domingo perfecto, conseguimos la primera victoria y la liderato del campeonato", comentó. No obstante, reconoce que aún hay margen de mejora respecto a su hermano mayor: "Sabemos que quizá no estamos un paso detrás de Marc, tal vez medio paso, pero Marc sigue siendo más fuerte y consigue hacer algunas cosas un poco mejor".
La situación actual de Márquez recuerda a la vivida por Jorge Martín el pasado año, compitiendo por el título desde un equipo independiente. Aun así, Álex matizó las diferencias: "Martín no ganó solo gracias a la gestión: era muy rápido, tiene un talento innato que en muchos momentos le permitió ganar". Sobre su propia situación, puntualizó: "Hemos sido competitivos hasta ahora, pero con Marc en pista aún no es suficiente para ganar un título. La situación es similar a la de Jorge, pero no igual. Él tenía una moto oficial".
La cuestión de las mejoras técnicas surgió inevitablemente, y Márquez fue claro: "Digo siempre lo mismo, las motos rojas tienen algunas 'chucherías' que les dan un algo más, una ligera ventaja en algunos momentos, no siempre". Aunque reconoció que su equipo trabaja al máximo, dejó la decisión en manos de la fábrica: "Hay algo que estamos tratando de conseguir que nos ayudaría a ser un poco más constantes en las carreras largas, es algo que ellos tienen. Pero no depende del equipo, no es una cuestión de presupuesto. Depende de si Ducati tiene la posibilidad de dárnoslo".
El balance que hace de esta primera parte del campeonato es muy positivo, aunque realista sobre los retos que vendrán: "No me esperaba un inicio de temporada como este, ya hemos igualado el número de puntos que obtuve en toda la temporada pasada. No esperaba estar en esta situación ya en Le Mans, ni ser líder del campeonato en la quinta carrera", admitió.
Sin embargo, advirtió: "En un año tan largo, con 22 grandes premios, habrá algún circuito que me pondrá en dificultad o algún fin de semana en el que no iré bien, o incluso dos. Es en esos momentos cuando hay que mantener la mente fría y calmarse. No debemos permitir que nos pase como el año pasado, cuando tras el accidente de Aragón nos perdimos durante cuatro fines de semana".
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Finalmente, Álex destacó su buena sintonía con la estructura de Borgo Panigale: "Siempre me he sentido muy querido, tengo una gran relación con toda Ducati", afirmó. Sobre su conexión personal con Gigi Dall'Igna, responsable técnico de la marca, señaló: "Gigi es claro y directo, igual que yo. Cuando hemos tenido un problema, lo hemos hablado y lo hemos resuelto. En Ducati siempre me he sentido muy arropado".
