 Por John Fernández@johnfervar |
Jorge Martín tiene un desafío por delante en su regreso a MotoGP. Mientras el actual campeón del mundo se recupera de su lesión, Marco Bezzecchi ha demostrado que está listo para pelear en lo más alto. El italiano ha brillado en los test de Buriram, terminando tercero en la tabla de tiempos y dejando claro que no será un simple escudero en Aprilia.
Massimo Rivola, CEO de Aprilia Racing, fue el primero en reconocer el gran trabajo del piloto de Rimini: "Estamos muy contentos con el trabajo realizado, Bezzecchi ha estado muy bien, ha asumido el desarrollo de la moto junto a Savadori", alabó el jefe en declaraciones a Motosprint.
"Con Jorge seguramente habríamos hecho algunas pruebas más dedicadas al rendimiento en seco, pero todo lo que hemos probado ha dado resultados positivos. Debo decir que Marco siempre ha sido muy preciso en sus comentarios, lo estamos disfrutando mucho, cuando Martín vuelva tendrá que arremangarse porque tendrá un compañero de equipo realmente duro", valoró también Rivola, a pesar de la ausencia del número #1.
El desempeño de Bezzecchi no solo es una buena noticia para Aprilia, sino que también es un mensaje claro para Martín: su regreso no será un paseo. Aunque el español es el actual campeón, la ausencia en los test ha permitido que su compañero gane confianza y se afiance como un serio contendiente. Bezzecchi ha demostrado que puede trabajar en el desarrollo de la moto y, al mismo tiempo, marcar tiempos competitivos, lo que lo convierte en una pieza clave dentro del equipo.
Estos test han dejado claro que la Aprilia RS-GP25 ha dado un paso adelante importante, consolidándose como la segunda moto más competitiva tras Ducati: "La moto de 2025 es claramente mejor que la versión del año pasado, estamos muy contentos especialmente con el motor. En mi opinión, Ducati aún no se ha revelado del todo, en cualquier caso nosotros como Aprilia creemos que estamos donde esperábamos estar", afirmó Rivola.
Sin embargo, Martín no solo deberá preocuparse por Bezzecchi, sino también por el resto de la parrilla. Ducati sigue siendo el rival a batir y con pilotos como Bagnaia y Márquez en plena forma, el español no puede permitirse un inicio de temporada dubitativo. La clave para él será adaptarse rápidamente a la evolución de la RS-GP25 y recuperar el ritmo perdido durante su ausencia.
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Para Martín, que volverá a la pista con una Aprilia más evolucionada (que no ha evolucionado del todo él) y un Bezzecchi que no se conforma con ser un segundón, el reto será mayúsculo. El español tendrá que ponerse las pilas si quiere reafirmarse como el número uno del equipo, y de la parrilla en general. La temporada de MotoGP 2025 promete emociones fuertes, con un campeonato que se perfila como uno de los más competitivos de los últimos años.
