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Scott Redding ha vuelto a ser el centro de atención tras su regreso a la Ducati Panigale V4R con el equipo MGM Bonovo. Después de años complicados con BMW, donde nunca logró adaptarse a la M1000RR, el británico confía en que su vuelta a la marca italiana lo lleve nuevamente a los puestos de cabeza, los mismos a los que aspiró en sus dos primeros años en el WorldSBK, cuando era piloto oficial Ducati.
Aunque reconoce que su paso por BMW lo dejó lejos de las posiciones de podio, Redding insiste en que la Ducati Panigale V4R ha demostrado ser una moto capaz de adaptarse a distintos estilos de conducción. Al respecto, comentó: “Cuando estuve en el equipo oficial también gané muchas carreras, pero en aquel momento los pilotos de otras Ducati no estaban al nivel de los que hay ahora. Se ve que depende de la calidad del piloto si una moto gana o no. El desarrollo del modelo también ha avanzado mucho desde entonces”, recoge el portal Speedweek.com.
Sobre las críticas de que la Ducati favorece a pilotos más ligeros como Álvaro Bautista, Redding fue tajante: “Nunca dudé de que la moto funcionara con un piloto más grande. Lo que pasaba es que con pilotos más pequeños tenía cierta ventaja. Eso me molestó cuando eligieron a Álvaro por encima de mí. Confiaban en la velocidad en recta, pero si se la quitas, ves los resultados que tuvo el año pasado", afirma el #45.
Redding está convencido de que, en su estado actual de desarrollo, la Panigale V4 R es una moto que puede ir bien con su estilo de pilotaje y sus características físicas: "Creo que el peso extra ayuda a manejar mejor la moto, porque hay que forzarla, y eso un piloto más grande lo hace quizá más fácilmente”.
La confianza de Redding en este nuevo proyecto es inquebrantable. A pesar de que sus últimas temporadas lo mantuvieron lejos de los primeros puestos, asegura que su objetivo sigue siendo el mismo: ganar. “Entiendo que mucha gente me subestime y crea que voy a repetir los resultados del año pasado. Eso no va a pasar, no puedo permitirlo. Ahora tengo uno de los mejores equipos, la mejor moto y un gran equipo humano detrás de mí. Ya no tengo excusas. Tengo todo lo que necesito”, afirmó con determinación.
El británico también detalló los esfuerzos que ha hecho para recuperar su mejor nivel, incluyendo su compromiso físico y mental. “Mostré a mi equipo cómo entreno, cómo he perdido peso. A veces habrán pensado que estoy loco, pero después de Jerez puede que empiecen a entender que hay un propósito detrás de todo esto”, explicó.
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El vigente campeón del mundo, Toprak Razgatlioglu, será el hombre a batir este año, de nuevo con BMW, precisamente la moto con la que Scott jamás fue competitivo. Redding no duda de su capacidad para retar al turco con Ducati: “Creo que puedo vencerlos a todos con mi moto. Si no creyera eso, no estaría aquí. He analizado cada carrera y sé dónde es fuerte Toprak. Él tiene ventajas en ciertas áreas, pero si logramos adaptarnos, podemos ganar”, declaró.
