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El mundo de las bobbers acaba de sumar una joya inesperada, directamente desde China, con un nombre que parece salido de un campo de batalla: la Benda Napoleon Bobber 500. Esta moto llega dispuesta a dar guerra en el mercado español con su estética rompedora y una mezcla de innovación y tradición que no deja indiferente.
La primera impresión cuenta, y la Napoleon Bobber 500 se ha asegurado de no pasar desapercibida. Lo que más llama la atención es su asiento flotante de corte minimalista, típico de las bobbers, pero llevado a un nivel superior con un diseño que parece desafiar las leyes de la gravedad. El manillar "Flying Wing" no solo aporta carácter, sino que también ofrece una postura de conducción deportiva que añade un punto inesperado a una moto de este segmento.
Por si esto fuera poco, las dimensiones de los neumáticos son casi intimidantes para ser una '500'. Unas ruedas que parecen sacadas de un tractor (150/80 delante y 180/65 detrás) subrayan ese aire robusto y potente que tanto gusta a los amantes de las motos con personalidad.
El motor de la Benda Napoleon Bobber 500 es sin duda uno de sus puntos más destacables, no solo por su configuración, sino también por su refinamiento técnico. Este V-Twin de 475,6 cc, con un diámetro por carrera de 67 x 63,6 mm, utiliza un sistema de distribución DOHC (doble árbol de levas en cabeza) que asegura un rendimiento suave y lineal en todo el rango de revoluciones. Su potencia máxima de 50 cv garantiza diversión en carretera y se complementa con un par motor de 42 Nm, ideal para salir con contundencia desde parado.
La transmisión por correa, menos habitual en este segmento, aporta suavidad al conjunto. Todo ello se complementa con un depósito de 16 litros que promete buena autonomía para disfrutar de largas rutas.
El mimo en los acabados es otro de los puntos fuertes de la Napoleon Bobber 500. El motor está adornado con detalles en oro y gris titanio, que le dan un aire premium sin caer en lo ostentoso. En el frontal, un faro LED redondo combina lo mejor del diseño clásico con tecnología moderna, un guiño a aquellos que buscan una estética atemporal con prestaciones del siglo XXI.
La instrumentación tampoco se queda atrás. Un panel redondo TFT a color minimalista y elegante proporciona toda la información necesaria de un vistazo. Además, el panel integrado en el semimanillar, junto con botones retroiluminados, demuestra que Benda no ha dejado ningún cabo suelto en lo que a diseño funcional se refiere.
Una curiosidad técnica es el camuflaje visual de sus sistemas de suspensión. Lo que a simple vista parecen horquillas y amortiguadores de diseño complejo son, en realidad, cubiertas de plástico que esconden componentes más convencionales. Detrás de esta ilusión se encuentra una horquilla telescópica delantera y amortiguadores traseros dispuestos en horizontal, todo ello montado sobre un chasis tubular de acero.
El peso de la moto es de 190 kilos en seco, una cifra bastante contenida para una bobber de estas características. El conjunto de escape, con dos silenciosos pintados en negro anticalórico, añade un toque agresivo al perfil lateral de la moto.
Ahora viene el dato que muchos estaban esperando: el precio. La Benda Napoleon Bobber 500 aterriza en España a un coste de 6.490 euros. Este precio la coloca como una opción extremadamente competitiva en el segmento de las bobbers, especialmente teniendo en cuenta su diseño y equipamiento.
La distribución corre a cargo de Keeway Group, que la pondrá a disposición del público a través de una red de 22 concesionarios oficiales repartidos por todo el país. Desde Madrid hasta las Islas Canarias, los aficionados al estilo custom podrán encontrar esta moto cerca de casa.
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