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La inminente llegada de Donald Trump al poder como el 47 presidente de los Estados Unidos tras ganar las elecciones del país con una victoria aplastante, tiene a la industria de la moto mirando directamente a la Oficina Oval de la Casa Blanca. Parece que tras la investidura del presidente prevista para el próximo enero de 2025, habrá cambios.
De hecho, en Europa ya se están preparando para ello. En el seno de la Comisión Europea se ha creado un "grupo de trabajo Trump" para mitigar el futuro impacto que tengan las decisiones que se tome desde la administración Trump próximamente. Y eso recaerá directamente, también, sobre los propios fabricantes americanos de motos.
El miedo es que Trump ha amenazado con imponer un arancel del 10 al 20 % a todas las importaciones extranjeras a Estados Unidos, mientras que los productos procedentes de China se verán afectados por un impuesto del 60 por ciento en suelo americano.
Los aranceles a las importaciones a Estados Unidos son una forma, según su estrategia económica, de proteger a las empresas y a la industria estadounidense en global. Pero, evidentemente, habría represalias por los propios europeos. La Comisión Europea, en una contramedida, podría aplicar aranceles de represalia a los productos estadounidenses que ingresan a Europa.
Eso, evidentemente, afecta a los muchos productos que llegan desde allí. Curiosamente, el primer producto afectado sería el bourbon (que en su mayoría proviene de destilerías de Kentucky). Pero también las motos, y es por ello que los fabricantes yanquis están preocupados por la situación.
La UE podría beneficiarse del impacto en estados clave como Wisconsin, hogar de Harley-Davidson, y Kentucky, conocido por el bourbon. Ambos, bastiones republicanos, podrían perder influencia política en 2026, algo que en Bruselas ven como una oportunidad para presionar a Trump y frenar sus aranceles.
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Por el momento, las cosas continúan como hasta ahora, porque Trump todavía no ha entrado en la Casa Blanca a pesar de haber ganado las elecciones. Pero a partir de enero del 2025 habrá que seguir muy de cerca los movimientos de la administración Trump.