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Energica, pionera en el desarrollo de motos eléctricas de alto rendimiento y creadora de la primera MotoE, ha anunciado su entrada en bancarrota y su liquidación judicial. La empresa italiana, que hasta hace poco era considerada un referente en la movilidad eléctrica sobre dos ruedas, se ha visto forzada a cesar sus actividades tras no encontrar una vía viable de financiación que permitiera su continuidad operativa.
Este desenlace se formalizó durante la reunión de su Consejo de Administración llevada a cabo este pasado 4 de octubre de 2024, marcando el fin de una de las marcas más innovadoras del sector.
Energica, controlada en un 75% por el fondo estadounidense Ideanomics Inc., confirmó que la decisión de proceder con la liquidación judicial se debe a la imposibilidad de atraer nuevos inversores y a la falta de opciones de financiación. La empresa ha optado por una liquidación total de sus activos para hacer frente a sus deudas, en lugar de intentar una reorganización que pudiera haber mantenido viva la compañía bajo nuevos propietarios.
En un comunicado oficial, la dirección subrayó que, a pesar de los esfuerzos por mantener la empresa en funcionamiento, las alternativas se agotaron en las últimas horas antes de la decisión final.
La trayectoria de Energica en el sector de las motocicletas eléctricas ha sido significativa desde su fundación. La empresa, con sede en Soliera, Italia, fue una de las primeras en apostar por la electrificación del motociclismo de alto rendimiento, destacándose tanto por su tecnología avanzada como por su contribución al desarrollo de competiciones de motos eléctricas. Energica fue la proveedora exclusiva de las motocicletas para el campeonato MotoE, organizado por la FIM y MotoGP, durante su ciclo inicial, lo que consolidó su papel como pionera en este campo, pasándole después el testigo a Ducati.
Sin embargo, pese a su éxito tecnológico y su aportación al sector, las dificultades financieras se fueron acumulando, y la empresa no logró cumplir con las expectativas de ventas. En los últimos meses, la plantilla de Energica se redujo drásticamente, pasando de 150 empleados a tan solo 45, quienes ya estaban siendo pagados por el sistema de seguridad social italiano (INPS) debido a la crisis financiera de la compañía.
El comunicado emitido por Energica también lamenta el impacto que esta decisión tendrá sobre sus empleados, aunque asegura que estos contarán con el respaldo de ayudas financieras y seguros para facilitar su reinserción laboral en la región. El cierre de Energica pone fin a un capítulo importante en la industria de las motocicletas eléctricas, una industria que todavía enfrenta desafíos significativos en términos de costos de producción, desarrollo tecnológico y adopción por parte del público.
La Energica Experia, lanzada en 2022, fue su último modelo
El descenso de Energica también se enmarca en un contexto más amplio de dificultades en el mercado de los vehículos eléctricos, tanto en el segmento de dos ruedas como en otros sectores. La recesión que ha afectado a la industria de los vehículos eléctricos ha impactado negativamente en varias empresas, incluida Ideanomics, la cual también ha experimentado problemas en otras inversiones relacionadas con la movilidad sostenible.
A lo largo de su historia, Energica ha intentado posicionarse como un líder en innovación, con modelos que destacaban por sus altas prestaciones y su avanzada tecnología, sobresaliendo su superbike eléctrica, la EGO Corsa, con motor EV de 160 cv. Quizás la política de precios de la firma italiana, con su deportiva eléctrica arrancando en 32.223 euros o los 29.742 euros que cuesta su último lanzamiento, la maxi-trail Experia, tampoco ha facilitado su continuidad.
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Su contribución a la competición de MotoE fue un hito importante, aunque el campeonato en sí no consiguió el nivel de visibilidad y apoyo que muchos esperaban. La falta de inversión en la promoción de la categoría por parte de Dorna, la organizadora de MotoGP, también fue un factor que no ayudó a aumentar la exposición de las motocicletas eléctricas en las pistas.