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Nürburgring puede pasar de ser el mismísimo cielo a ser el infierno en cuestión de un abrir y cerrar de ojos. De hecho, no se le apoda el 'Infierno Verde' en vano. Sus casi 20 kilómetros y 73 curvas son una auténtica meca de los aficionados al mundo del motor; hay quienes peregrinan al menos una vez en la vida para conocerlo y disfrutar de las bondades del divertido pero peligroso trazado.
Meterse en moto es más arriesgado si cabe. Cuando no hay pruebas de competición en marcha, durante gran parte del año el trazado queda abierto para los aficionados, que pueden suscribir una cuota anual para entrar, o bien pagar la entrada de día. Darse una vuelta es todo un espectáculo, pero también un riesgo que hay que calcular milimétricamente.
Durante estas tandas, hay quienes prefieren ir de paseo disfrutando del circuito al que han jugado en la Playstation durante años. Hay otros que directamente van con el cuchillo entre los dientes, y la convivencia en pista se hace muy difícil. No hay más que ver los cientos de vídeos y cuentas que hay en YouTube retransmitiendo los accidentes que prácticamente suceden día tras día.
Y para ver lo complicado del tema, el último vídeo de un youtuber que decidió entrar con su colega y sendos Porsche al mítico trazado germano. Ninguno de los dos van precisamente descalzos; llevan un Porsche 718 GT4 RS con el que uno de ellos graba toda la acción con la cámara 'on-board'.
Las dos bestias de 500 CV no van precisamente de paseo por el circuito, jugándose en cada ápice de cada curva. En un determinado momento llegan a la altura de una Ducati Panigale V4, que tampoco va precisamente de paseo. Sin embargo, y patente queda lo peligroso de la convivencia en este circuito, los Porsche dedciden emprender una peligrosa maniobra en el que están a punto de llevarse por delante a la moto.
Tras salir de una curva, el Porsche aprovecha toda la potencia del motor e intenta adelantar a la moto en una zona difícil; el ansia le puede y se precipita tan cerca de la moto que están a centímetros de tocarse. Al final, el coche a la gravilla y la moto libra de milagro. Podría haberse convertido en un accidente muy feo a 180 kilómetros por hora, que es lo que marca el cuentakilómetros del coche en ese momento.
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En resumen, Nürburgring no es el lugar más apropiado para irse de tandas si lo que quieres es ir tranquilo. Los accidentes son una constante en el trazado germano, y más vale ir prevenidos y con un buen seguro por lo que pueda pasar. Hasta cuando no tienes la culpa, como bien acabamos de comprobar.
