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 Por John Fernández@johnfervar |
Ya ha pasado un tiempo desde que a Jorge Martín le diese calabazas Ducati por Marc Márquez; el de San Sebastián de los Reyes mantuvo la compostura y asumió el golpe, moviéndose rápidamente hacia Aprilia para las próximas temporadas. Al piloto español todavía le queda por delante medio año de carreras con la marca italiana, y esta semana ha participado en la World Ducati Week, en la que aún es su casa.
Allí, Martín esgrimió que “fue una bonita historia con Ducati y Pramac”, y consciente, dice, de que “aún no hemos cerrado el círculo, creo que fueron años de desarrollo de la moto, del equipo… Diría que crecimos juntos”. Jorge explica que cuando él llegó, “la Ducati no era la mejor moto, aún no había ganado ningún título. Pero con Pecco, Enea y también conmigo el proyecto ha crecido. Es una pena no haber podido seguir adelante”.
A pesar de las calabazas de los de Borgo Panigale, el piloto español confiesa que “quizá no sea mi último WDW” y deja la puerta abierta a que “quizá regrese en el futuro. Pero ahora es así”, se resignó en palabras a GP One.
Sobre su rendimiento en pista ya sabemos que la indecisión de Ducati le llegó a pasar factura, pero que una vez supo su futuro definitivo, volvió con las pilas cargadas: “Creo que ya en Alemania, cuando tenía contrato con Aprilia y todo estaba claro, fui muy rápido, más que nadie. Cometí un error, pero aprendí de él. Lo importante era encontrarme con un nivel alto, y así me siento ahora. No tengo que hacer nada en particular, estoy en buena forma y creo que me basta para terminar carreras. Creo que he dado un buen paso adelante, y si trabajamos bien, podremos permanecer en la lucha hasta el final”, explicó.
No solo su marcha, al Pramac también le afectará que el año que viene no será una estructura satélite de Ducati, sino de Yamaha. El cómo ha cambiado el box desde entonces lo explica Martín con un “creo que todo es normal en Pramac, no ha cambiado mucho respecto a antes. Estos cambios futuros nos han unido como equipo”.
Sin embargo, Jorge narra que “no es que estemos solos, pero ciertamente estamos más solos que en otras temporadas pasadas. Antes de que tuviéramos la confianza para continuar con Ducati, fácilmente se podían pasar por alto muchas cosas, ahora como equipo tenemos que unirnos aún más para dar el 100%”.
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Sobre su futuro con Aprilia, el madrileño no se quiere marcar demasiadas expectativas: “Honestamente, no sé qué esperar. No necesito entusiasmarme demasiado con lo que está por venir”, confiesa. Pero sí que confía en que “vimos que ganaron con Maverick y con Aleix. Se ve que es un proyecto en crecimiento, pero seguro que al principio no será como en Sepang con la Ducati y marcas récord. Después de unas carreras seremos competitivos y llevaremos resultados a casa”.
