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El Yamaha Racing Heritage Club (YRHC) aprovechó la visita del Yamaha Racing Experience (YRE) al Circuito de Jerez Ángel Nieto para desempolvar algunas de sus joyas. El evento reunió a leyendas del motociclismo como Valentino Rossi y Luca Cadalora, junto con actuales pilotos del Campeonato Mundial de Superbikey del Campeonato Mundial de Resistencia de Yamaha, en una exhibición de icónicas motocicletas de dos tiempos.
El YRHC fue establecido para preservar y celebrar el rico legado de carreras de Yamaha, y no hubo mejor manera de hacerlo que invitando a miembros y pilotos legendarios a este exclusivo evento de dos días en España. Bajo un cielo despejado y soleado, el evento contó con una impresionante alineación de pilotos campeones del mundo.
El nueve veces campeón del mundo, Valentino Rossi, se unió a Cadalora, tricampeón del mundo, así como a los actuales pilotos de WorldSBK de Yamaha, incluyendo al seis veces campeón del mundo de Superbike, Jonathan Rea, y a su compañero de equipo en Pata Prometeon Yamaha, el campeón del mundo de WorldSSP 2020, Andrea Locatelli. También participaron Dominique Aegerter, doble campeón del mundo de WorldSSP (2021 y 2022), y los campeones mundiales de resistencia del equipo Yamalube YART Yamaha EWC Official Team, Niccolò Canepa, Karel Hanika, Marvin Fritz y Robin Mulhauser.
El box del Yamaha Racing Heritage Club fue una de las atracciones principales, recibiendo elogios como el "garaje más cool" por parte de Canepa. Uno de los mayores atractivos del evento fue la exhibición de motocicletas de dos tiempos icónicas, traídas a España por miembros del YRHC.
Entre las estrellas de la muestra estuvieron las YZR500 de Eddie Lawson, en sus versiones de 1986 (0W81) y 1987 (0W86), así como la YZR250 0WB9 de 1990 de Cadalora, con la que terminó tercero en el campeonato de ese año. Estas motos fueron generosamente proporcionadas por la familia Battisti, en memoria del fallecido Luciano Battisti, uno de los miembros fundadores del YRHC y un legendario coleccionista de motocicletas.
Además, otras motocicletas destacadas incluyeron dos réplicas de la YZR500 0WL6 de 2001, una en los colores de Max Biaggi y la otra basada en la Yamaha de Alex Hoffman de 2002, cuidadosamente reconstruidas por los miembros del YRHC, Carlo Mattarozzi y Alex Arletti.
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También se presentaron tres réplicas de la TZ750 del YRHC, una basada en la TZ750D que Christian Sarron pilotó hasta el segundo lugar en el Campeonato de Fórmula 750 de 1977, otra basada en la YZR750 con la que Giacomo Agostini ganó su última carrera de campeonato mundial en 1977, y otra basada en la YZR750 con la que Johnny Cecotto ganó el título de Fórmula 750 en 1978.
La presencia de tan impresionante alineación de motos y pilotos presentó el desafío de decidir quién montaría cada máquina. Al comenzar el evento, Rossi no dudó en subirse a la YZR500 de 1986 de Lawson, siendo la primera vez que "Il Dottore" montaba una moto de Gran Premio de 500cc dos tiempos desde que MotoGP cambió a la era de los cuatro tiempos en 2002. Rea lo acompañó en la 0W86, mientras que Cadalora montó su YZR250, ofreciendo un espectáculo único con un trío de Yamaha de dos tiempos GP en pista.
Rea describió la experiencia como un momento de "pellízcate a ti mismo" y algo que nunca olvidará. El norirlandés también revivió recuerdos más adelante en el evento cuando salió a la pista con la réplica de la TZ750 de Agostini, una moto similar a la que su abuelo solía pilotar. "Montar la TZ750 de Giacomo Agostini fue un momento especial para mí, ya que mi padre solía tener una en su garaje y patrocinó a Joey Dunlop cuando pilotaba una, así que fue un momento emotivo".
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Otro momento destacado fue Locatelli montando la réplica de la 0WL6 de Biaggi, una de las últimas motos de GP de dos tiempos de su era, cumpliendo un sueño de infancia. "Montar esa moto fue increíble. Crecí viendo a Biaggi en la tele y soñando con pilotar esa misma moto. No me decepcionó. Era realmente rápida, los neumáticos y los frenos eran buenos, y sinceramente, fue un sueño hecho realidad pilotarla en Jerez".
Canepa también se mostró encantado de montar la réplica de Biaggi, destacando la agresividad del motor y el sonido impresionante. Describió la TZ750 de Sarron como "una bestia", mientras que Locatelli se maravilló al pilotar la réplica de la YZR750 de Agostini, señalando lo diferente que es de su moto actual, pero igualmente poderosa.
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Y qué mejor que un vídeo resumen de cuatro minutos de duración para vibrar con el sonido de estas máquinas en Jerez:
