 Por John Fernández @johnnyfumi |
Pedro Acosta puso a todos los aficionados en pie en su segunda carrera de MotoGP. Ya lo hizo en la primera de Qatar, aunque no pudo culminar con el resultado que el murciano hubiese deseado. Sin embargo, tuvo su redención en Portimao, donde el domingo no perdonó y acabó subiéndose a su primer podio en la categoría reina, y solo en su segunda carrera larga del mundial.
El piloto murciano pasó gran parte de las carreras detrás de Pecco Bagnaia. Y observador, detectó unos cuantos detalles que le podrían servir para mejorar su pilotaje. “He disfrutado yendo detrás de Bagnaia porque me ha dado tiempo a ver muchas cosas que en un entrenamiento no me da”, comentaba el dorsal #31 al término del Gran Premio de Portugal.
Acosta sigue puliendo su pilotaje, y fijarse en un doble campeón de MotoGP como Pecco Bagnaia es una de las mejores tácticas que podría haber tomado. Y efectivamente, así lo hizo. El Tiburón de Mazarrón explicó que en su particular estilo de pilotaje, Bagnaia “estaba jugando muchísimo con el cuerpo; está sentado mucho más atrás en la moto que los demás, y siempre está jugando un poco con los pies”.
La posición de los pies encima de las estriberas, dice, era muy peculiar en el caso de Bagnaia. Concreta que “los retuerce de una manera rara, así que yo también los retorcía”, entre risas.
Sobre qué beneficios le podía aportar ese estilo de pilotaje, el piloto español detectó que “es verdad que Bagnaia juega con el cuerpo y gana un poco de tracción, sobre todo en los primeros metros de la aceleración”. Y si algo le hace falta a él mismo, dice, es precisamente eso: “Yo creo que es lo que me falta porque voy mucho más fuera de la moto que él”, sentenció al respecto.
El estilo de pilotaje del propio Acosta tampoco pasa desapercibido, precisamente. Hace unos días era alguien veterano encima de una moto como Jack Miller quien flipaba con cómo “su cabeza va a rozar el suelo”. De hecho, estaba asombrado con cómo los dos pilotos oficiales de KTM “íbamos con la lengua fuera intentando perseguirle, pero no pudimos hacer nada. Realmente se le veía bien sobre la moto. Pedro ha pilotado de un modo fantástico, nada más pasar a Brad, sacó el martillo”.
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El australiano concretaba que “en realidad no está sobre la moto, pasa mucho tiempo fuera de ella, va tocando con todo por el suelo, parece que la cabeza está a punto de rozar el asfalto en algún momento”. Tan bueno le parece que “desearía pilotar como él, yo soy un poco menos estiloso, pero él lo está haciendo bien, puede poner la moto donde quiere y eso siempre es positivo. Hemos mejorado mucho la KTM durante el último año, y él le está sacando todo el provecho posible”, sentenciaba sobre el español, que será rival para quitarle el puesto sobre la moto oficial.
