![]() Síguenos en WhatsApp |
Pecco Bagnaia está feliz tras comprobar que la Desmosedici GP24 funciona mejor de lo esperado. El recientemente proclamado campeón del mundo de MotoGP le dio el visto bueno a los ingenieros de Borgo Panigale durante el último test de Valencia, confirmando el potencial de un prototipo que, según palabras del piloto turinés, ya está al mismo nivel que su antecesora, la GP23, la moto que heredarán los pilotos satélite del fabricante boloñés.
Tras firmar la 11ª posición en un test en el que Pecco no quiso apretar ni hacer time-attack, el italiano afirmó "estar contento con el test, hemos hecho un buen trabajo, aunque las condiciones no eran buenas, sobre todo por el viento. Los ingenieros de Ducati han traído un nuevo motor que ya funciona igual que el anterior, y eso ya es un plus. Además, en las áreas en las que he pedido mejoras, como en la entrada en curva, va mejor. Es el mejor modo de irme de vacaciones".
Según el de Turín, la moto ideada por Gigi Dall'Igna para la próxima estación "no tiene grandes cambios", e incluso guarda muchas semejanzas con la GP23: "El hecho de que algunas cosas estén al nivel de la versión anterior es positivo, y en otros es incluso mejor. Estoy muy contento la verdad, y eso que Valencia no es el mejor circuito para hacer determinadas pruebas".
Por primera vez en dos años, Pecco se marcha de vacaciones con la conciencia tranquila, convencido de que la nueva moto funciona y será competitiva dentro de dos meses en los test IRTA de Sepang: "Sabía que este test sería fundamental, porque llevamos dos años marchándonos de los test de noviembre con dudas sobre las novedades. En 2021 estuvimos en Jerez con unas condiciones perfectas y todo nos fue genial, luego fuimos a Sepang y acabó siendo un desastre. El año pasado, por ejemplo, salimos de aquí sin estar demasiado convencidos".
A la pregunta de cuál ha sido el cambio más notable que ha encontrado en la moto nueva, Bagnaia relata que la GP23 "tenía la entrega de potencia demasiado suave, a mí me gusta una conexión más directa con el acelerador, digamos que ahora sientes la potencia", destacando además un cambio en el comportamiento general de la moto que la acerca más al prototipo de hace dos temporadas: "La GP22 era una moto con la que podías tener mucha velocidad en curva, te ayudaba a girar; la GP23 mejoró en tracción y en la primera parte de la frenada, pero perdíamos un poco entrando en la curva. Creo que esta GP24 tiene un equilibrio de pesos más parecido al de la moto de 2022".
Poco antes de arrancar el test de Valencia, la Dorna y la FIM hicieron público el nuevo sistema de concesiones, que ahora fija su baremo en los puntos obtenidos por cada fábrica en dos ventanas de tiempo distintos; de momento, Ducati será la que arrancará con menos ventajas: concretamente con 170 neumáticos por piloto para hacer test y sin la posibilidad de hacer wildcards.
A este respecto, Bagnaia se mantiene un poco al margen, "yo soy piloto y me dedico a darlo todo", aunque sabe que "los técnicos no estarán tan contentos (rosas). No tener wildcards no supondrá una gran diferencia para mí, pero tener menos neumáticos para los test sí, aunque 170 creo que son suficientes para hacer el trabajo más importante. Creo que las concesiones deberían ser las mismas para todas las fábricas que hayan conseguido ciertos resultados. Por un lado, están Yamaha y Honda, pero Aprilia y KTM han ganado carreras y han sido competitivas. También es cierto que nosotros somos ocho pilotos, y eso lógicamente ayuda".
Leer también: Raúl Fernández, enamorado de la Aprilia RS-GP 23: "Soy 8 décimas más rápido por vuelta"
Por último, cuestionado sobre el impresionante rendimiento exhibido por Marc Márquez en su primera toma de contacto con la Ducati del Gresini Racing, Bagnaia deja claro que para él no fue ninguna sorpresa ver al de Cervera entre los mejores con la Desmosedici GP23: "Cuando anunció que se iba a Ducati, dije que marcaría el mejor tiempo en el primer test, y no me he equivocado demasiado. Creo que se va a divertir con nuestra moto", concluye Pecco.