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Raúl Fernández ha acabado el test de Valencia con una sonrisa de oreja a oreja. Con Miguel Oliveira ausente en Cheste tras su última lesión, el madrileño ha cargado con casi todo el trabajo que tenía previsto su equipo, el RNF Team, ahora renombrado bajo la denominación temporal de Aprilia Racing mientras Dorna ultima los detalles de la venta de las dos plazas del equipo Cryptodata a una estructura llegada de la NASCAR, que mantendrá a los mismos pilotos y maquinaria, además de todo el staff técnico y de organización.
Tras completar un par de tandas con la moto de este año, Raúl no tardó en poner sus manos sobre la Aprilia RS-GP 23, la misma moto con la que Aleix Espargaró y Maverick Viñales cerraron el curso en Valencia, un prototipo con el que el dorsal #25 se ha encontrado cómodo de inmediato, bajando sus mejores registros del fin de semana pasado en casi un segundo.
Tras asegurarse el quinto mejor registro del test -a 263 milésimas de la Aprilia de Maverick Viñales-, Fernández charlaba con la prensa desplazada hasta Valencia sobre este test tan positivo para él.
Resumen del día: "Por la mañana hice un par de salidas con la moto antigua para ver que todo está en el sitio, que todo funciona. Hemos visto que en seguida estábamos en tiempos de ritmo de carrera. Ahí hemos decidido saltar a la moto nueva y empezar a trabajar. En seguida hemos visto que la moto era muchísimo mejor, al menos para mí. No sé muy bien por qué es tan rápida, tengo más feedback en la parte delantera, he sido de siete a ocho décimas más rápido por vuelta con neumático medio".
Con qué se queda de a RS-GP 23: "Me quedo con lo que he sentido con la parte delantera. Está claro que todavía queda trabajo, sé y creo que ha sido bueno probarla hoy y darle a Aprilia información para este invierno, entiendo el camino de qué falta en esta moto, y creo que teniendo este margen de tiempo podrán trabajar en algo para Sepang".
Desconoce el motivo de tanda mejora: "No sé qué cambia la verdad. Tengo más sensación con la parte delantera. Hoy con tanto viento era un día difícil, pocas veces entrabas igual en la curva cuatro y la once, por las ráfagas de viento. Ha habido dos veces que, por el viento, he perdido la rueda delantera, y por tener este feedback la he conseguido levantar. Muy fácil todo".
Mucho apoyo de Aprilia en su box durante el test: "Cuando he vuelto al box, estaba ahí la gente de Aprilia. He hecho una tanda con neumático usado, y ha sido toda la tanda en 1:29 y 1:30 bajos. Lo primero que me han dicho ha sido '¿Qué?', y yo les he dicho 'No sé' (risas). Es broma, sí sé por qué, ha sido muy bueno para ellos, y para mí. Mi ritmo era carrera de 30 bajos, y he sido medio segundo más rápido".
Después de un arranque de temporada difícil, empieza a ver la luz: "Nuestra segunda parte del año era cuestión de tiempo, de ponerlo todo en el sitio, de hacer un resultado que funcionara para terminar de creérnoslo. Esta última parte del año ha sido muy positiva, siempre en Q2, peleando con las Aprilia de fábrica. Me quedo con eso, estoy muy contento de haber acabado como hemos acabado".
Confirma que estará en los test de túnel de viento junto al resto de pilotos Aprilia: "Sí, iré al túnel de viento. No nos dejan descansar (risas). Pero ya lo hicimos el año pasado, no viene de nuevas".
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La polémica sobre CryptoDATA y la expulsión del RNF Team no le preocupa: "Estoy tranquilo. Nosotros tenemos contrato con Aprilia y yo soy piloto de Aprilia. Ellos nos han dado tranquilidad, así que contento".
