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Todos los focos le apuntan a él y son muchas las incógnitas respecto a su futuro. Luca Marini quiere terminar de la mejor manera posible la temporada, aunque ahora mismo su mayor preocupación será saber con qué moto competirá la próxima temporada. Con una oferta sobre la mesa de Repsol Honda, el de Urbino ya cuenta con la aprobación de su hermano para cambiar de estructura.
En la jornada previa del Gran Premio de Qatar, el piloto italiano ha admitido que de cara a este fin de semana Ducati parte como favorita, especialmente si se tiene en consideración su gran rendimiento históricamente en la pista de Losail: “Este es un circuito donde Ducati va muy fuerte cada año y gana carreras, así que creo que será otra buena pista para nosotros, aunque no será fácil porque todos están en excelente forma y Jorge y Pecco están luchando por el campeonato y aquí también lucharán por la victoria”.
Ha sido el protagonista del paddock en las últimas horas y no es para menos. Luca Marini podría dejar su actual moto para subirse a la Honda RC213V que deja Marc Márquez libre al final de la presente temporada. En caso de que eso sucediese, el piloto italiano dejaría la moto campeona del mundo en la pasada campaña por una que necesita recuperar el sendero del triunfo y lo haría por un contrato bianual en el Repsol Honda Team.
El piloto del Mooney VR46 Racing Team ha comentado que desconoce cuál será su futuro de cara a la próxima temporada, algo que le incomoda, especialmente si se tiene en consideración que la próxima semana se termina la campaña 2023, pero espera tener noticias en las próximas jornadas: “No puedo decir nada por qué todavía no sé nada. La situación es la del domingo después de la carrera. Estas son circunstancias difíciles también para mí y me gustaría tener más tiempo, dado que Valencia es la próxima semana. Yo también estoy esperando, ya veremos. Lo mejor que puedo hacer ahora es concentrarme en este fin de semana e intentar conseguir un buen resultado también en Losail”.
Sobre ello, el #10 ha asegurado que se trata de un movimiento natural con la intención de seguir mejorando profesionalmente y que para él no significa romper una etapa que ha sido crucial para él: “No veo que sea una situación extraña, cada año hay cambios en los equipos. Para mí se trata simplemente de intentar dar lo mejor de mí y conseguir un buen rendimiento, porque al final mi trabajo es pilotar la moto lo mejor que pueda y trabajar bien con el equipo y los ingenieros creo que lo estamos haciendo bien”.
Han sido muchas las voces críticas que han afirmado que la relación entre la VR46 Academy y Marini ya había llegado a su fin, algo que el italiano ha apuntado que es incorrecto y que únicamente ha cambiado parte de su rutina: “Siempre voy al Rancho. Cambié mi estilo de entrenamiento, pero nada ha cambiado con mis compañeros de la Academy. La situación es perfecta, vamos a cenar juntos todas las semanas”.
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El hermano de Valentino Rossi también ha dejado claro que, en caso de irse a Honda, "no sería una carrera en solitario" y seguiría trabajando con la VR46 Academy: "No sería nada extraño ni diferente a lo que hicieron Pecco o Franco. Sería simplemente una cuestión de ponerme en condiciones de obtener buenos resultados y tener una carrera increíble y especial en MotoGP”, concluía el dorsal #10.