 Redacción @todocircuitoweb |
¿Son suficientes los 370 cv de una Suzuki Hayabusa sobrealimentada para ganar a un expiloto de MotoGP en una carrera de aceleración? Esta es la duda que ha querido aclarar la gente de TTS Performance, la empresa británica que está detrás de la ya famosa SuperBusa, un espectacular cohete tierra-tierra montado sobre una Hayabusa de nueva generación que, gracias a un supercargador Rotrex C30-94, es capaz de superar los 370 cv de potencia.
Con el fin de garantizar su fiabilidad, el motor ha sido forjado por completo, se ha sustituido la bomba de combustible original por otra de mayor caudal, la electrónica se ha hecho a medida, se ha instalado un basculante trasero monobrazo de aluminio, se han mejorado los componentes internos de la horquilla y cuenta con discos de freno de mayor tamaño, llantas de fibra de carbono para aligerar peso, nuevos alerones... y otros cambios que la convierten en una de las máquinas más efectivas de la historia siempre que vayas en línea recta.
TTS Performance fabricará un total de 40 unidades de su SuperBusa y las venderá a 55.000 euros cada una, y para promocionar su venta en el Reino Unido, han tenido la genial idea de llamar al strongman y estrella de la televisión británica, Eddie Hall, para comprobar de primera mano su descomunal potencia. Coronado en 2017 como el 'Hombre Más Fuerte del Mundo' (World's Strongest Man), Hall es una auténtica mole; mide 1,91 metros de altura y pesa 164 kilos, aunque se va a más de 190 kilos cuando se pone encima toda su equipación de moto.
Para ponerle algo de picante a esta prueba, TTS invitó también al expiloto de MotoGP y actual integrante del equipo Yoshimura SERT en el Mundial de Resistencia, Sylvain Guintoli. El piloto galo se trajo en su furgoneta su moto personal, una Suzuki GSX-R 1000 R que tiene en su garaje y con la que acude con frecuencia a trackdays que se organizan por todo el Reino Unido, donde reside desde hace años.
Ambos protagonizan hasta tres lanzadas, aunque el resultado siempre es favorable para Guintoli. Pese a los 370 cv de la SuperBusa, el peso de Hall sumado a su inexperiencia a la hora de salir con velocidad desde parado hacen que Sylvain ( de sólo 75 kilos) y su GSX-R 1000 arrasen en todas las salidas.
El mejor registro del strongman fueron 11,7 segundos en el cuarto de milla y una velocidad máxima al cruzar la línea de meta de 152 mph (244 km/h); Guintoli, por su parte, logra bajar a los 9,7 segundos sobre su GSX-R 1000 de 200 cv de potencia, mostrándose mucho más rápido que Hall durante los primeros metros de la salida, donde el control del embrague y el gas son clave para evitar el wheelie.
Guintoli no se pudo resistir a sentir la fuerza brutal de la SuperBusa; el que fuera probador de Suzuki en MotoGP durante estos últimos años demostró que las manos de un piloto experimentado son fundamentales para exprimir el potencial de una máquina de este calibre, y así lo demostró el galo con un registro de 9,2 segundos en el cuarto de milla y 167 mph de velocidad (268 km/h), nada mal para alguien que nunca antes había probado la moto.
"El empuje que tiene es impresionante, creo que jamás había llevado una moto así", dice Guintoli tras la comparativa. "Una MotoGP es más rápida porque es mucho más ligera y más rígida, y se nota más estable. Con los dispositivos de altura, toda la electrónica, el embrague competición... cuando sales con una MotoGP todo es más eficiente, pero esta moto con el supercargador se siente muy rápida, el feeling es similar".
Leer también: Alberto Puig: "Zarco siempre es un piloto bienvenido"
Puedes ver el vídeo a continuación, y si no controlas el inglés, siempre puedes activar los subtítulos opcionales:
