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Hace ahora 24 años, el motociclismo español vivió uno de sus momentos más dulces. Por primera vez en la historia de nuestro deporte, dos pilotos nacionales se alzaban con sendos títulos mundiales de motociclismo, y además uno de ellos lo conseguía en la categoría reina, 500, hasta ese año vetada para los nuestros.
Era 1999, y tanto Emilio Alzamora como Álex Crivillé ilusionaron a todo un país. El de Seva fue el primero en consolidar su título, y lo hizo en la penúltima carrera de la temporada, en Brasil, en una cita que ganó Norifumi Abe y en la que Crivillé logró arañar 10 puntos que le dieron el título de forma matemática sobre el norteamericano Kenny Roberts.
Alzamora tuvo que esperar una semana más, concretamente a la última carrera del año en Argentina. Fue un fin de semana agónico en el que su único rival por el título, Marco Melandri, logró ganar en el circuito Óscar Gálvez de Buenos Aires, obligando así a Emilio a ser segundo si quería alzarse con la corona de 125 cc. El español lo consiguió, y cerró la temporada con un punto más que Melandri para levantar el trofeo de Campeón del Mundo en el mismo podio del trazado argentino.
Aquel 1999 fue inolvidable para los nuestros, y así quedó plasmado en una fotografía en la que, además de Alzamora y Crivillé, aparecían Sete Gibernau y Carlos Checa, el primero enrolado en las filas del equipo Yamaha Marlboro y el segundo con la Honda del equipo Repsol; acabaron quinto y séptimo respectivamente en la clasificación general de 500 cc.
Los mismos guerreros que hace ahora 24 años se batían en duelo en pista, hoy son grandes amigos, y siempre que tienen alguna oportunidad, se juntan para rememorar viejas batallas y ponerse de nuevo el mono de cuero. Lo vimos hace tres semanas en Cheste, donde Sete, Checa, 'Crivi' y Alzamora se sumaron al elenco de invitados del Racing Legends y tuvieron la oportunidad de rodar con las mismas motos de 80 cc con las que ganaron en su momento el Criterium Solo Moto, hace más de 30 años.
De hecho, Carlos Checa llegó incluso a usar el mismo mono con los colores de Rieju, y aunque le costó sudor y lágrimas ponérselo, finalmente lo consiguió tal y como él mismo compartido en sus redes sociales. Alzamora también lo intentó, pero al final tuvo que desistir.
Mirad como nos hemos peleado con el mono!!!@CircuitValencia @MotoGP @WorldSBK pic.twitter.com/EbbrZckkY1
— Carlos Checa Carrera (@CarlosCheca7) March 4, 2023
El propio Checa también ha difundido algunas imágenes y vídeos del último encuentro que mantuvieron los cuatro en el circuito privado de Sete Gibernau, en Forallac (Girona). Equipados con los monos de la escuela de Sete, +BO Racing, las cuatro leyendas españolas disfrutaron de lo lindo en la revirada pista que Sete levantó en la parte trasera de su finca en el año 2008, sin duda un auténtico paraíso para cualquier aficionado a las motos.
Gibernau resumió esta jornada tan especial con una frase de lo más emotiva. En sus redes sociales, el barcelonés escribió: "Los pasos de una amistad duradera. En la vida tú eliges con quien compartes el camino". Crivillé, en un tono más distendido, también hizo un comentario en su cuenta de Instagram sobre esta jornada de reunión con viejos amigos: "Inolvidable reencuentro en el +BO Racing experience. Que bueno fue enroscar el gas y disfrutar con todos mis compañeros de batalla como unos juniors. 'Quien tuvo retuvo'. Mil gracias bro Sete".
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En este vídeo compartido por Carlos Checa puedes ver un resumen del día tan especial que compartieron estas figuras del motociclismo español:
Quien tuvo, retuvo..... ¿no?
— Carlos Checa Carrera (@CarlosCheca7) March 20, 2023
Bueno... retuvo lo que pudo!!! 🤣🤣🤣@MotoGP @SeteGibernau15 @criville_alex
#emilioalzamora #SeteGibernau #AlexCrivillé @alpinestars @DAZN_ES pic.twitter.com/E2hvgG1VYy