 Redacción @todocircuitoweb |
Zayn Sofuoglu, el hijo mediano del cinco veces campeón del mundo de Supersport, Kenan Sofuoglu, sigue haciendo de las suyas. Si hace unos meses le vimos pilotando la Honda Gold Wing de su padre con sólo tres años de edad dentro del circuito que el propio Kenan levantó en Turquía hace unos años, ahora Zayn ha vuelto a dejarnos la boca abierta sobre una máquina mucho más potente y rápida, esta vez de cuatro ruedas.
Kenan Sofuoglu es un auténtico apasionado de la adrenalina y la velocidad; además de su pasado como piloto y su actual papel como mentor de estrellas del calibre de Toprak Razgatlioglu, el expiloto de 38 años sigue enganchado a las emociones fuertes gracias a la flota de vehículos que guarda en su garaje personal, donde podemos encontrar bestias como la Kawasaki H2 R de 326 cv o su última y más llamativa adquisición, un Ferrari SF90 Stradale.
Lanzado originalmente en 2019, esta máquina italiana es un homenaje al legado de competición del fabricante del Cavallino Rampante; sus siglas SF hacen referencia a Scuderia Ferrari, el equipo de competición fundado en 1929, y denominación SF90 la hereda del monoplaza con el que Ferrari completó la temporada 2019 del Mundial de Fórmula 1.
El SF90 Stradale es el primer coche de calle fabricado por Ferrari con tecnología híbrida; su motor principal de combustión cubica 3,9 litros, cuenta con 8 cilindros dispuestos en V, doble turbo y una potencia final de 780 cv a 7.500 rpm. Si esta cifra ya te parece una locura, debes saber que el SF90 Stradale monta también tres motores eléctricos capaces de generar hasta 220 cv que, sumados a la caballería del propulsor V8, consiguen la cifra mágica de 1.000 cv.
Con estos números, es fácil entender sus cifras de velocidad máxima (340 km/h limitados por la electrónica) y su aceleración de 0 a 100 km/h en unos escuetos 2,5 segundos.
¿Te imaginas poner este impresionante deportivo valorado en 490.000 euros en manos de un niño de cuatro años? Eso es lo que ha hecho Kenan en el último vídeo que ha compartido del pequeño Zayn; equipado con un casco y subido a una silla de niños adaptada al asiento delantero, el pequeño piloto turco logra accionar los pedales de freno y acelerador gracias a unas alzas especiales instaladas para él.
Con una destreza difícil de creer, el pequeño Sofuoglu no tiene el más mínimo problema en completar una vuelta al circuito de su padre, y aunque lógicamente no lo hace a alta velocidad, tampoco se puede decir que vaya dando un paseo.
La publicación del vídeo ha generado reacciones de todo tipo. Tal y como ya ocurrió hace meses, cuando Zayn pilotó una Honda Gold Wing, algunos seguidores de Kenan creen que el expiloto turco ha sido un irresponsable por poner a su hijo a los mandos de un coche que alcanza los 1.000 cv de potencia, mientras que otros simplemente le aplauden por darle a su pequeño la oportunidad de ponerse al volante de un coche único en el mundo y seguir formándole como futuro piloto de carreras.
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Puedes ver el vídeo a continuación y decidir por ti mismo de qué lado estás:
This kid is going places! Incredible talent! 👏🤯
— Autosport (@autosport) March 13, 2023
📹 x @/ zaynsofuoglu on IG pic.twitter.com/GambCgWyLO
