 Redacción @todocircuitoweb |
Pese a llevar compitiendo desde el año 2006 y haber pasado por el Mundial de 125 cc, Moto2, Supersport y MotoE, Dominique Aegerter nunca había tenido la oportunidad de ponerse a los mandos de una MotoGP hasta que Suzuki le llamó la semana pasada para ofrecerle el asiento de la GSX-RR en el test de Misano, cubriendo la baja de un Joan Mir que a día de hoy sigue recuperándose de la lesión sufrida en Austria.
Como un niño en Navidad, el piloto suizo completó un total de 33 vueltas a lo largo de la tanda matinal del martes antes de que los de Hamamatsu desmontaran sus boxes para dar por finalizada su participación en este test. Y es que, a falta de seis carreras para despedirse definitivamente de MotoGP, Suzuki no tenía nada que probar en Misano.
Por este motivo, el debut de Aegerter fue lo más llamativo dentro del garaje de la fábrica japonesa. Vestido con su mono del Mundial de MotoE, el ya proclamado campeón de la categoría eléctrica del campeonato disfrutó al máximo de esta experiencia, y aunque acabó en la cola de la tabla de tiempos, marcó un más que respetable 1'33.907 que le situó a 2.3 segundos del mejor del FP1, Aleix Espargaró.
Cuando la prensa le preguntó al piloto de Rohrbach qué se siente al llevar por primera vez una MotoGP de 280 cv, Aegerter lo comparó con una bestia salvaje: "Nunca me he subido a un tigre, pero creo que se podría comparar con una MotoGP (risas). Es difícil de explicar, me he divertido mucho, tanto la potencia como el agarre es simplemente exuberante", resumió el suizo.
El piloto de 31 años aseguró que hay "ciertos aspectos que me han impresionado especialmente", como por ejemplo "lo que agarran los Michelin, es una locura. La caja de cambios seamless es bestial, y corre tanto que te deja sin respiración. Alcanzas una velocidades increíbles en espacios muy cortos, y luego tienes que frenar. Me he encontrado cómodo frenando, incluso derrapando de atrás. El equipo me ha ayudado mucho".
Dominique valoró de forma positiva su rendimiento al manillar de la GSX-RR, e incluso le planteó a Suzuki la posibilidad de cubrir la baja de Joan Mir en Aragón si el balear no se recupera a tiempo de la fractura que arrastra en su tobillo derecho desde Austria: "He acabado a un par de segundos de los más rápidos, con dos juegos de neumáticos nuevos y sólo 33 vueltas. Creo que lo he hecho bien. Sería genial probar la moto otra vez, les he preguntado si, en caso de que Joan Mir siga ausente, podría correr en su lugar. Lo primero es desearle una rápida recuperación".
En el caso de Aegerter corriera en Aragón, el suizo tendría un mes de septiembre de lo más ajetreado con tres fines de semana consecutivos compitiendo: "Ahora tengo varios fines de semana intensos, primero tengo que ir a Magny Cours para correr el Mundial de Supersport, luego iré a Motorland por si tengo la posibilidad de correr ahí, y después de Aragón, de nuevo a Barcelona para Supersport".
¿Y qué opina Yamaha de todo esto? Su jefe de equipo en el Mundial de Supersport, Kervin Bos, no comparte la emoción del suizo teniendo en cuenta que ahora mismo se está jugando el liderato del Mundial de Supersport, donde Aegerter encabeza la clasificación con 14 puntos de ventaja sobre Lorenzo Baldassarri.
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De momento, Yamaha le dio luz verde a Aegerter para participar en el test de Misano, pero está por ver si podrá correr o no en Aragón la próxima semana y correr el riesgo de lesionarse y echar por tierra el trabajo realizado hasta ahora en el Mundial de Supersport: "He hablado por teléfono con mi jefe de equipo de Ten Kate, y no estaba tan feliz como yo. También hablé con el director del equipo Yamaha en Superbikes, Andrea Dosoli, y con el jefe de Yamaha Motor Europa. Todos me dieron el visto bueno. Tengo que darles las gracias por haberme dado el visto bueno para este test, porque en unos días tendremos la cita de Magny Cours de Supersport", cuenta el ya campeón de MotoE a Speedweek.com.
