 Por John Fernández | Foto: Motogp.com@johnnyfumi |
La vuelta de Marc Márquez es un acontecimiento que desde Honda están esperando con gran impaciencia. El talismán de la marca del ala dorada sigue fuera de combate, pero no por mucho tiempo más. Ya tiene el alta médica para volver a su rutina de entrenamiento habitual mientras recupera masa muscular después de su complicada operación. Así que ya ha empezado a prepararse, y lo que más importa, a preparar la moto.
No con él subido. Su portavoz y guía más directo es Stefan Bradl. El piloto alemán lleva sustituyendo al español unas cuantas carreras ya, y aunque los resultados son verdaderamente catastróficos para los japoneses, ese no es su objetivo, sino 2023. "Ya estamos concentrados en 2023 para preparar todo lo mejor posible y que pueda volver al podio", ha comentado Bradl en conversación directa con Speedweek.
El #93 estuvo presente en los primeros ensayos en Spielberg, en riguroso directo y al borde de la pista. Incluso se le pudo ver moverse con un scooter por el circuito. Allí, Stefan Bradl, el piloto probador de la marca, fue su altavoz más directo sobre la moto. "Fue agradable tenerle de vuelta. Márquez no me dice que tengo que hacerlo así y bajo una décima, estaría bien que fuera así", comenta al respecto sobre su visita exprés.
Bradl cree que Márquez "tiene un ojo especial" y que "no se anda con chiquitas". Sin embargo, ese no fue el análisis más "decisivo" para él, sino que "lo que fue decisivo fue lo que discutimos en el fondo, tuvimos largas conversaciones individuales sobre lo que queremos para el futuro", comenta. O, en otras palabras, objetivo mejorar la RC213V de 2023.
Márquez ya ha asegurado que está muy encima del progreso de la moto del próximo año, porque este, todo el mundo lo da por olvidado: "Quiero ayudarle lo mejor posible. Estamos muy de acuerdo. También nos enviamos muchos mensajes de voz por WhatsApp en el pasado y seguimos en contacto. Hicimos comentarios muy similares sobre la moto en los últimos años", explica Bradl al respecto.
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Se compenetran, dice que están "de acuerdo al cien por bien", y valora muy positivamente "tenerlo en el box para que viera lo que estamos haciendo y ver a dónde queremos ir y cómo hacerlo".
Para Bradl, "si el rendimiento no está a la altura, es un gran reto". Y vaya que si lo es. "Queremos darle las herramientas para que vuelva a tener éxito. Veo fuego en sus ojos para su regreso", sentencia ambicioso.
