 Redacción @todocircuitoweb |
Marc Márquez lleva semanas lejos del paddock de MotoGP, pero sólo en distancia, porque el #93 está más pendiente que nunca de todo lo que ocurre en el campeonato y dentro de su fábrica, Honda, actualmente inmersa en una de sus peores rachas desde que participa en el Mundial de Motociclismo como consecuencia de un prototipo incapaz de funcionar en manos de ninguno de sus cuatro pilotos.
Para entender lo que está ocurriendo en HRC, sólo hay que echarle un vistazo rápido a la clasificación general de pilotos y encontraremos que Marc Márquez sigue siendo el mejor piloto de la marca del ala dorada a pesar de que lleva fuera del paddock cuatro carreras. Con 60 puntos, el de Cervera cuenta todavía con 15 puntos más que Takaaki Nakagami, y su distancia con su compañero de filas en el Repsol Honda Team, Pol Espargaró, crece hasta los 18 puntos.
Marc ha tenido más de dos meses meses para entender todo lo que está ocurriendo este año dentro y fuera de Honda, y en una entrevista ofrecida a DAZN ha calificado de "interesante" lo que está sucediendo este curso a nivel de fichajes, con "muchos movimientos" que sin duda convertirán el 2023 en un año totalmente impredecible, con varios equipos renovando su box, entre ellos la dos escuderías de Honda.
"Es una mala suerte y una pena que Suzuki se vaya del campeonato, pero esto ha movido todo el mercado, empezando por mi hermano Alex que se mueve a Gresini", explica el catalán en referencia a la futura llegada de Álex Márquez al Gresini Racing. "Hablando con él, necesitaba una motivación diferente, es difícil mantener la motivación compitiendo y quedando tan atrás, además con tantas caídas...", recuerda Marc, que ha vivido más cerca que nadie la pesadilla que Álex lleva atravesando los dos últimos años.
El ocho veces campeón del mundo recuerda que su hermano no será el único que saldrá de Honda para escapar de una moto incapaz de ofrecer resultados competitivos, y asume que su futuro compañero de equipo será el balear Joan Mir: "No sólo él, también Pol Espargaró que se va a mover a KTM, y los pilotos que eran Honda se han movido. Mi hermano se va a Ducati, Pol a KTM, y quedan dos plazas libres. Una la ocupará Alex Rins, un gran piloto que ya demostró en Silverstone que está a un gran nivel, y parece o eso dicen que la otra Repsol Honda será para Joan Mir, pero no hay nada confirmado que yo sepa".
Desde que Marc se fracturó el húmero derecho en Jerez durante el verano de 2020, Honda arrastra dos años que se podrían calificar de auténtico fracaso teniendo en cuenta que nadie tiene más títulos de MotoGP que ellos. A Márquez le duele especialmente esa situación, por eso hará todo lo que esté en su mano para recuperar la gloria perdida siempre y cuando los japoneses capten su mensaje.
"Yo miro por Honda, por el equipo, porque mi ilusión es volver a ver a Honda en lo más alto, no como la he visto estas últimas carreras", lamenta el #93. "Ver las Honda arriba. Para eso necesitamos un trabajo en equipo, que no se pierda información por el camino, que Japón trabaje con Europa, que Europa trabaje en el circuito y los pilotos den el 100%. Pero ahora los pilotos Honda necesitamos una ayuda desde Japón, algún cambio. Si sólo sufre un piloto lo puedes llegar a entender, pero si sufren todos los pilotos...", deja caer Marc.
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Para el piloto español, es una obligación que su fábrica recupere la competitividad del pasado, y mira hacia el 2023 con optimismo y ganas de volver a ser el Marc de antes: "Yo en las carreras que he hecho este año también he sufrido, no sólo por el brazo, también porque no me encontraba del todo bien con la moto. Es ahí donde HRC y Repsol Honda estamos obligados a hacer un cambio y luchar por el mundial las próximas temporadas".
