![]() @todocircuitoweb |
El caso de Dominique Aegerter es motivo de estudio. A sus 31 años, el piloto suizo atesora una experiencia difícil de igualar: corrió el Mundial de 125 cc durante tres temporadas (2007-2009), compitió en Moto2 desde 2010 hasta 2019 a tiempo completo, conquistando una victoria y un total de siete podios en más de 170 carreras en la categoría intermedia, y desde 2020 compagina sus labores como piloto del Mundial de MotoE -donde fue subcampeón el año pasado- con Supersport, donde está logrando unos resultados excelentes.
En su año de debut con la Yamaha R6 del equipo Ten Kate, en 2021, Aegerter se coronó campeón ganando un total de 10 carreras y subiendo al podio en 16 ocasiones, unas estadísticas que el de Röthenbach está mejorando este curso con un año prácticamente perfecto: de diez carreras disputadas ha ganado nueve, y con ocho rondas todavía pendientes para acabar, su distancia con el segundo clasificado, el italiano Lorenzo Baldassarri, ya se ha ido a los 64 puntos.
Sobre el papel, es evidente que Aegerter se está ganando una plaza en el Mundial de Superbikes por méritos propios. Sin embargo, con el verano alcanzando su ecuador y la mayoría de equipos cerrando sus filas de cara a 2023, el piloto del Ten Kate Racing y líder destacado del WorldSSP todavía no ha recibido ninguna llamada para dejar atrás la categoría intermedia de Supersport y dar el salto al WorldSBK, su verdadero objetivo para el próximo año.
Nada más llegar a Most, donde este fin de semana se disputa la ronda checa del WorldSSP, Dominique Aegerter lamentó la falta de apoyo que está recibiendo este año por parte del fabricante de su moto, Yamaha, una marca que no parece contar con el suizo entre sus planes para 2023.
"En Donington gané las dos carreras y logramos la pole número 100 para la marca, pero nadie de Yamaha se presentó a pesar de que esas 100 poles eran un hito importante", ha dicho Dominique en declaraciones recogidas por GPone.com. "No sé el motivo, quizás no les gusto o se les olvidó, pero me da un poco de pena", admite el suizo medio en broma medio en serio, dolido por no llamar la atención de ningún equipo de Superbikes.
Pese a no tener nada cerrado para el año que viene, Aegerter sabe que los contratos del paddock del WorldSBK se cierran muy tarde, algunos incluso con la temporada ya terminada, por eso no tira la toalla y confía en revalidar su título de Supersport a final de curso y, con suerte, ganarse la confianza de alguna estructura que pueda darle una moto competitiva.
"Por el momento no tengo ninguna oferta de SBK, no me ha contactado nadie", cuenta Aegerter. "Me gustaría ir a Superbikes, dar el salto con Ten Kate, ya que en el pasado muchos pilotos han hecho este mismo recorrido tras ganar en Supersport. Pero todavía nadie me ha dicho nada", insiste el suizo.
Leer también: Jorge Lorenzo aparca su Porsche para volver a las motos por un día... y prueba una Ducati
Mientras que el equipo oficial PATA Yamaha ya tiene cerrada su alineación para el próximo año, no sucede lo mismo con su equipo satélite, el GRT Yamaha, donde militan este año el norteamericano Garrett Gerloff y el japonés Kohta Nozane, dos pilotos que, de momento, no están ganándose su renovación con sus resultados en pista -Gerloff marcha 12º en la general y Nozane 21º-.