 Por John Fernández @fernanduzo |
El peso en los pilotos de MotoGP es un factor clave en el rendimiento a la hora de subirse a la moto. El tamaño y peso de ellos supone un compromiso realmente serio, ante las estrictas dietas y entrenamientos a los que están sometidos, el fin es que sean lo más ágiles posibles, y una diferencia de unos pocos kilos puede suponer un serio problema. Ejemplo de ello es Jack Miller.
Jack Miller fue subcampeón del mundo de Moto3, y fue de los pocos pilotos que se atrevió a dar el salto directamente a MotoGP tras la temporada 2014. Dejó Moto2 por el camino, con lo que eso suponía: un año de adaptación, ganar peso, manejar una moto de 600 cc... Ya no solo ganar peso, sino cambiar su forma física.
De hecho, su moto pasó de tener 50 cv a los 270 cv de la Honda RC213V del LCR Team. En su equipo ya se rumoreaban críticas sobre su estado físico. Y es que el salto de la categoría de la más pequeña a la más grande supone un sacrificio físico importante, como es natural.
También la altura cobra un factor muy importante, como el caso de Danilo Petrucci, que ya sufrió ser uno de los pilotos más altos del paddock. Y no todos sufren solo por el peso, sino por la forma física para llevar tales aparatos.
En una entrevista a Speedweek el australiano comenta que se dio cuenta inmediatamente de su problema de peso: "Sólo una temporada. Enseguida me di cuenta: 'Esto no puede seguir así'. MotoGP es un trabajo a tiempo completo. En ese momento me beneficié del hecho de que encontré un compañero de equipo en Cal Crutchlow en LCR, que entrenaba mucho y me ayudó mucho en esta área. Me dejó muy claro lo que hay que invertir en esa cuestión si se quiere tener éxito en MotoGP. Entonces lo entendí rápidamente".
En retrospectiva, se veía como uno de los más fuertes: "Mirando ahora el estado en el que estaba en 2015 y lo en forma que estoy ahora, estoy convencido de que ahora soy uno de los tipos más en forma de la parrilla. No quiero decir que disfruto de mis entrenamientos, porque nadie los disfruta siempre. Pero se vio, por ejemplo, en la carrera en Sachsenring este año. Esa fue quizás una de las carreras más agotadoras de mi carrera a 36 grados. Pero me sentí bien de principio a fin. Y si puedes hacer eso en una carrera como esa, entonces estás en gran forma para todas las demás carreras".
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Y claro, hacer ejercicio: "Bueno, tuve que correr, pero sólo para poder mantener mi peso. Todo era cuestión de peso corporal. Puedo decir que mi peso no ha cambiado mucho desde entonces, pero sí la forma de mi cuerpo. El músculo extra me ha hecho un poco más pesado, pero la diferencia es pequeña".
